Jorge Chueco llegó al Aeroparque metropolitano procedente de Misiones, donde pasó la noche tras ser detenido en la localidad paraguaya de Encarnación y expulsado de ese país.
Rodeado por efectivos de Gendarmería y Prefectura, fue bajado de la aeronave esposado y con chaleco antibalas y de inmediato fue trasladado a la sede de la Gendarmería Nacional, ubicado a una cuadra de los tribunales federales de Comodoro Py.
El colaborador de Báez quedó a disposición del juez Casanello, que el lunes había ordenado su captura internacional para poder indagarlo por su presunta participación las operaciones de lavado de activos realizadas a través de la financiera Helvetics, en la que figuraba como apoderado.
La desaparición del abogado fue denunciada a fin de la semana pasada por su familia que dijo que había viajado a la localidad misionera de Puerto Iguazú, en la Triple Frontera.
Chueco habría sido mencionado en su declaración indagatoria por el «arrepentido» Leonardo Fariña pero en su llamado a indagatoria y orden de captura, el juez dio por probado que había endosado nueve cheques por un monto total de de 33 millones de dólares hacia el grupo de Baéz, como parte de la operatoria de lavado.
