En la primera semifinal de la Conferencia Oeste, los Rockets vencieron a los Spurs por 126-99. James Harden fue la figura excluyente: 20 puntos y 14 asistencias. El equipo ganador anotó 22 triples.
Houston quería aprovechar cualquier oportunidad que le diera San Antonio en el primer encuentro de la semifinal del Oeste. Y terminó imponiendo un récord con su desempeño ofensivo que le permitió tomar ventaja y elevar su confianza. El 126-99 en el AT&T Center puso a los Rockets 1-0 en la serie, y obliga a los Spurs a un replanteo para el segundo juego, que será el miércoles en el mismo escenario.
Los Rockets anotaron 22 de 50 triples, y alcanzaron la mayor cantidad de tiros de tres puntos intentados y acertados por cualquier equipo ante los Spurs durante su larga historia en playoffs.
Manu Ginóbili terminó con 8 puntos (2/5 dobles, 1/2 triples y 1/1 libres), 1 rebote, 1 asistencia y 1 robo en 11 minutos de juego. La amplia ventaja conseguida por Houston sorprende, más que nada, por los antecedentes inmediatos en partidos entre estos equipos: en los cuatro encuentro de la temporada regular, hubo tres definidos por apenas dos puntos y el restante, por seis. En el partido de anoche, la ventaja para los Rockets llegó a ser de 39 (119-80 cuando promediaba el último cuarto).
«Simplemente quisimos aprovechar lo que permitió la defensiva», comentó Harden, quien terminó con 20 puntos y 14 rebotes. «En la serie pasada (ante Oklahoma City), hubo mucho contacto físico, no pudimos convertir muchos triples y tuvimos que encontrar la forma de hacerlo desde la pintura (frente al Thunder). En esta serie sí nos dieron oportunidades de disparar desde lejos», agregó el barbado.
Seis jugadores de Houston aportaron cifras de dos dígitos, incluido Clint Capella, con 20 unidades y 13 rebotes.
«Ellos llegaron listos para el partido y nos arrollaron esta noche», aceptó el ala pivote de los Spurs, LaMarcus Aldridge, limitado a sólo cuatro puntos. «Ellos acertaron la mayoría de sus disparos. Dimos pelea, pero cometimos errores en el comienzo. Ellos lo aprovecharon. Una vez que encontraron su ritmo al ataque, no pudimos pararlos. Nosotros nunca encontramos el nuestro».
Fuente: AP