El primer ataque fue contra el templo de San Jorge y murieron 27 fieles. A las pocas horas el segundo, en la catedral de San Marcos de Alejandría, dejó 11 víctimas. Suman 115 heridos.
Al menos 28 personas murieron este domingo y otras 74 resultaron heridas en dos atentados contra dos iglesias cristianas coptas en el norte de Egipto, según fuentes de seguridad y del Ministerio de Salud.
En un primer ataque contra el templo de San Jorge, en la ciudad de Tanta, 120 kilómetros al norte de El Cairo, 27 fieles perdieron la vida y 41 resultaron heridos cuando participaban en una misa con motivo de la celebración del Domingo de Ramos, que marca el comienzo de la Semana Santa.
Poco después, otro atentado contra la catedral de San Marcos, en la ciudad costera de Alejandría, causó la muerte a otras 11 personas y heridas a 33, según indicó el Ministerio de Sanidad egipcio en un comunicado.
Cientos de personas se concentraron ante la catedral de San Jorge de la ciudad egipcia de Tanta para mostrar su solidaridad con las víctimas del atentado. Varios fieles golpean las puertas cerradas del templo, que entreabren en alguna ocasión, dejando salir un intenso e irrespirable olor a sangre.
Ashraf Ramzi, un copto de 26 años, cuenta a Efe que él y su padre se salvaron gracias a un pilar de la iglesia que detuvo la onda expansiva de la explosión que, según Ramzi, ocurrió en las primeras filas de la iglesia, donde se sientan los hombres y cerca de las bancadas de los diáconos. Con los ojos enrojecidos, Ramzi todavía se encuentra conmocionado y su relato de lo ocurrido es impreciso y entrecortado. Recuerda que la sala de oración estaba repleta y que en cada banco había sentadas al menos 7 personas, y asegura que vio en torno a medio centenar de cadáveres.
En estado de shock, se encuentra también la cristiana Zizef Adel, que con una palma de Domingo de Ramos ensangrentada en la mano, únicamente repite una y otra vez como un salmo: «Dios está con nosotros».
En varias páginas web cristianas se han difundido fotos del interior de la iglesia donde se pueden ver los cadáveres de los fieles amontonados junto a los restos de los bancos de madera, y salpicaduras de sangre en los muros del templo.
Ningún grupo ha asumido la autoría de los ataques, que se producen 20 días antes de la visita del papa Francisco, que tiene previsto desplazarse a Egipto los próximos 28 y 29 de abril en su primer viaje a Oriente Medio.
El pasado 11 de diciembre, 28 fieles de la minoría cristiana copta murieron en un atentado perpetrado por un suicida contra la iglesia de San Pedro, ubicada junto a la catedral de El Cairo, en el barrio de Al Abasiya.
La filial egipcia del grupo yihadista Estado Islámico (EI) asumió la autoría de dicho atentado que fue lanzado por un terrorista suicida.
«Que sepan todos los infieles y apóstatas de Egipto y de todas partes, que nuestra guerra contra los idólatras continúa», aseguraba una nota difundida entonces por el grupo extremista.
Egipto ha sufrido atentados de manera reiterada desde el golpe militar del 3 de julio de 2013 que derrocó al entonces presidente, el islamista Mohamed Morsi, pero la gran mayoría de estos ataques hasta ahora habían estado dirigidos contra las fuerzas de seguridad, especialmente en la península del Sinaí.
Fuente: EFE