Apretado por el escándalo generado por los 300 handies inactivos, guardados por el municipio mientras paga el alquiler por otros semejantes, el intendente dispuso por fin ponerlos en la calle.
Sorpresa e indignación por el destino de unos 300 handies que el intendente Carlos Arroyo, tras un convenio con el Ministerio de Seguridad tenía guardados en el municipio mientras pagaba un alquiler innecesario por tecnología similar. Por eso el jefe comunal dispuso que en los próximos días se destinaría a la Policía Local.
Fuentes cercanas a la Policía Local dejaron trascender que después de Semana Santa, se liberaría esos equipos y que la mayoría serán destinados a la fuerza.
En febrero pasado, el presidente del Foro Municipal de Seguridad, Juan Manuel López, y la Defensoría del Pueblo habían denunciado que Arroyo no había entregado a la Policía Local 300 equipos de comunicación que la Provincia entregó en comodato hace más de un año.
El jefe comunal por fin admitió que parte de esos equipos eran utilizados en otras áreas municipales como en el CEMA. Ahora parece haber recapacitado acerca del despropósito de pagar un alquiler por un servicio que el municipio tiene disponible e inmovilizado y, por la insistencia de las autoridades del foro, los jefes de la policía local y todo el arco opositor que lograron por fin que la autoridad entre en razones.
