Tras arduos debates, plagados de chicanas de clara intencionalidad política, el HCD aprobó la prórroga de la emergencia sanitaria. La norma que permite agilizar compras y contrataciones.
El Concejo Deliberante aprobó por unanimidad la prórroga por 90 días de la emergencia sanitaria, la norma que le permite al gobierno municipal agilizar compras y contrataciones en el contexto de la pandemia.
Marianela Romero (UCR), miembro informante del interbloque de Juntos por el Cambio, hizo un repaso de los gastos que realizó el gobierno de Guillermo Montenegro y resaltó que la emergencia se usó “en forma razonable y responsable”.
En tanto Roberto «Chucho» Páez, del Frente de Todos, aclaró de entrada que “en ningún momento” el principal bloque opositor pensó en no aprobar la ordenanza, pero se quejó de que los gastos realizados en todo el tiempo que lleva la emergencia fu de apenas “$ 16 millones, el 0,08 % del presupuesto municipal”.
Recordó “se habilitaron nada más que tres hoteles” como centros extrahospitalarios, criticó la poca información sobre lo que se hacía en los retenes.
“Nuestro bloque va acompañar porque somos serios y responsables y así lo demostramos desde el primer momento” culminó.
En tanto su compañera de bloque Virginia Sívori aseveró que “hubo algunas cuestiones que no han quedado claras” y pasó a enumerar lo que a su juicio fueron errores graves en la política de asignación de fondos,
El jefe del bloque de Acción Marplatense, Horacio Taccone, marcó diferencias con la política sanitaria del municipio, pero aceptó que quedó “satisfecho” con las respuestas de Bernabei y Blanco. “Hubiéramos hecho cosas muy distintas a la que hizo el gobierno y no hubiéramos hecho algunas otras, como los famosos retenes. Pero es el gobierno que eligió la gente y toma las decisiones que toma”, aclaró.
El jefe del bloque del Frente de Todos, Marcos Gutiérrez -que durante toda la sesión dejó en claro que el único interés que lo mueve está vinculado al proceso electoral y la necesidad de opacar las intervenciones siempre sólidas de su contrincante interna Virginia Sívori – sostuvo que al intendente Guillermo Montenegro le faltó “decisión política” para tomar medidas que acompañaran a la Nación y a la Provincia. Si bien no supo sostener con ejemplos sus dichos tampoco mereció respuesta de parte del bloque oficialista: todos entendieron que los esfuerzos del edil estaban centrados en aparecer como el defensor de las decisiones tomadas en nación y provincia y mejorar su hoy débil posición de cara a la interna local.
Dijo que el jefe comunal actúa con tibieza, le reclamó “mayor compromiso” y controles, e incluso se tomó su tiempo para criticar un Zoom con estudiantes en el que se alegró de verlos en las aulas, justo cuando en el AMBA están suspendidas las clases presenciales.
Solo Marianela Romero pareció tomar nota de la sobreactuada intervención del concejal kirchnerista al recordar las promesas iniciales del gobierno nacional sobre la cantidad de vacunados que iba a haber en los primeros meses del año y los que efectivamente hubo.
Pero ahí quedó todo. Ni los propios ni los extraños parecieron dispuestos a acompañar el show político que Gutierrez pretendía montar ya que las urgencias sanitarias ocupaban el centro de la preocupación del cuerpo.
Terminado el cruce de gentilezas se pasó a votar la prórroga y por 90 días más el gobierno comunal contará con ese instrumento fundamental.