Habrá tres regiones con alto grado de autonomía, incorporarán civiles al control de interno, ascensos, bajas y sanciones, se desplazarán 86 altos mandos y se reformularán Investigaciones.
Tras la fuga de los Lanatta y Víctor Schillaci, comenzó la purga. El gobierno de María Eugenia Vidal anunció el pase a retiro obligatorio de siete comisarios generales que integraban la cúpula de la Policía Bonaerense. Los policías desplazados encabezaban las superintendencias de Seguridad, Seguridad Vial y Suministro.
En medios cercanos al Ministerio se comentaba esta tarde que los desplazamientos son solo la primera parte de la reorganización policial ya que en las próximas semanas se conocerá un listado de 86 oficiales de la cúpula y la división de la policía provincial en tres grandes comandos con un alto grado de autonomía.
[Tweet «La nueva Policía: Habrá tres grandes Departamentales con alto grado de autonomía»]
Para el mes de marzo se conocerá una nueva carta orgánica que regirá el funcionamiento de la institución y se buscará integrar formalmente en su estructura de conducción a la representación ciudadana bajo cuya supervisión se pondrá el área de Asuntos Internos y el estudio de los ascensos, bajas y sanciones en la policía provincial.
No existe aún un criterio definitivo con respecto a la Policía Local, ya que existe la duda entre avanzar en su descentralización o ubicarla como una Superintendencia más, bajo la órbita de cada una de las tres conducciones regionales.
[Tweet «La nueva Policía:Se integraran civiles a Asuntos Internos y definirán ascensos,bajas y sanciones»]
Lo que si se ha resuelto es alejarla de la conducción política de cada distrito para evitar que termine contaminándose con las internas partidarias o quedando a expensas de la voluntad de los intendentes, algo que ven con preocupación desde la gobernación.
Ahora se comenzó con el desplazamiento de los responsables de aquellas áreas que se presumen más vinculadas -por complicidad o ineficiencia- con los hechos que sacudieron al país en las últimas semanas.
[Tweet «La nueva Policía: Se busca que las Locales no sean manejadas por la política y los intendentes»]
Se trata de Miguel Ángel Maccario (Superintendencia de Seguridad de San Martín-Tres de Febrero); Oscar Eduardo Terminiello (superintendente de Seguridad Interior Centro); Gabriel Alejandro Lamónico (superintendente de Seguridad Interior Sur); y Miguel Ángel Alanís (superintendente de Seguridad Oeste). La lista abarca, también, a Claudio Marcelo Blanco (superintendencia de Seguridad); Claudio Alejandro López (director provincial de Suministro); y Rubén Alberto Lobos (responsable de la Superintendencia de Seguridad Vial).
El anuncio, efectuado en un comunicado del Ministerio de Seguridad, confirma los rumores que abundaron a lo largo del día. Los trascendidos, finalmente concretados, apuntaban al malestar que había en el seno del gobierno bonaerense con la fuerza tras el escándalo que desató el escape de Martín y Cristian Lanatta y Víctor Schillaci de la cárcel de General Alvear.
[Tweet «La nueva Policía: Habrá una nueva legislación que está siendo supervisada por León Arslanián»]
Desde el mismo momento en que se produjo la fuga, las autoridades provinciales y también nacionales sugirieron que había complicidad de la policía con los evadidos, aunque evitaron apuntar nombres o cargos. A lo largo de la búsqueda, que se extendió 15 días y terminó en Santa Fe, funcionarios de las mismas esferas adelantaron que habría consecuencias por lo que no dudaron en calificar como fallas.
El escape, primero, y el operativo, después, estuvieron atiborrados de idas y vueltas y procedimientos que no condujeron a nada. Integrantes del gobierno provincial debieron hacer un esfuerzo para disimular por esos días la desconfianza que reinaba en la gobernación con el accionar de la fuerza. Hoy, ya con los tres evadidos de nuevo tras las rejas, las secuelas se hicieron efectivas.
Fuentes del ministerio de Seguridad precisaron a Télam que los reemplazos de estos jefes policiales se realizarán cuando se efectivice en los próximos días la reestructuración de la fuerza.
