Con más de dos horas de demora, que fueron continuidad de una larga noche de discusiones, el Concejo Deliberante comenzó la sesión especial Preparatoria.
Fueron días y semanas de cabildeos y especulaciones, en las que fue quedando en claro la intención de los bloque de Acción Marplatense, Frente Renovador y Frente para la Victoria de producir un cambio en la presidencia del cuerpo. Sin embargo a último momento los seguidores de Sergio Massa optaron por abstenerse, favoreciendo la jugada pero marcando su molestia por lo que consideraron «promesas incumplidas» por parte del oficialismo.
De hecho las discusiones continuaron hasta muy entrada la madrugada ya que el bloque de la UCR reclamaba la continuidad al frente de la institución, aún aceptando que Nicolás Maiorano abandonara el sillón principal.
Pero fue en vano, los «amotinados» ya habían tomado la decisión y tras jugarse los nombres de Héctor Rosso y Alejandro Ferro para suplantarlo -inclusive se deslizó también el del casi oficialista Lucas Fiorini que en los últimos tiempos ha respondido incondicionalmente a los mandatos que llegan desde el despacho principal de la comuna, lo que no ha dejado de despertar fuertes discusiones en su bloque del Frente Renovador- se llegó al consenso necesario para que Ariel Ciano se haga cargo de la responsabilidad.
Llegado el momento de votar, la UCR y la Agrupación Atlántica de Carlos Arroyo votaron en contra mientras como ya adelantamos los massistas se abstuvieron.
Una mañana tensa en una institución que en el último año ha sido sinónimo de escándalos, conflictos y sospechas.
Y un futuro que muestra densos nubarrones en aquello que pomposamente se suele llamar «convivencia democrática».
Que en Mar del Plata… se escribe con comillas.