OCEBA, ese organismo de control que desde hace mucho maneja la supuesta «controlada», comunicó a la administración del edificio que el lunes 2 procederá a cortar el suministro. Grave.
Los comerciantes que explotan los locales de la Galería Central, en la esquina de Avda. Luro e Independencia, no podían esta mañana salir de su asombro. Habían recibido una notificación formal del OCEBA -organismo que debe controlar el cumplimiento que la empresa EDEA hace de sus obligaciones contractuales y del servicio- por la cual se les notificaba que el próximo lunes 2 será cortado el suministro eléctrico de todo el complejo.
Un conflicto de vieja data, producido por el lamentable estado de los medidores de la empresa emplazados en una zona húmeda e insegura, parecía de esta forma haber llegado al final después de largas negociaciones y diversas acciones legales. Sin embargo el costo de la «solución» parece excesivo e injusto.
No ha quedado en claro si la demora en la respuesta a esta cuestión de seguridad es responsabilidad de la empresa o de la administración del edificio. Lo que si es claro es que los perjudicados serán los comerciantes que nada tienen que ver en la resolución de la cuestión.
Esta mañana se sucedían las reuniones y se trabajaba contra reloj para poder tomar las medidas que aseguren el suministro y las condiciones mínimas que se exigen para preservar la zona afectada y evitar consecuencias de gravedad.
Después deberá discutirse si no ha llegado el tiempo en el que OCEBA deje de ser una dependencia más de EDEA para convertirse en un verdadero organismo de control; algo que hoy a todas luces no es.
Pero lo cierto es que la resolución sigue adelante y si no prima la responsabilidad del ente OCEBA, la celeridad de EDEA y la pronta respuesta de la administración de la galería, decenas de trabajadores se quedarán el lunes sin su fuente de ingresos.
Una vez más aparece la Mar del Plata en la que siempre pagan justos por pecadores.