El eterno debate: ¿tener o o no tener armas en nuestra casa?

(Redacción)El grave accidente de un chico de 7 años con un arma de su padre vuelve a plantear el debate acerca de la tenencia de armas por parte de la sociedad civil. Una discusión equivocada.

Un chico de 7 años ingresó este jueves en ambulancia desde Vivoratá con una herida por arma de fuego en cabeza, en la región frontal. El parte médico sostiene que «se le realizaron maniobras de reanimación donde se observó que había un proyectil sin orifico de salida en el cráneo, por lo que en quirófano se le realizaron las acciones para extraerlo y este viernes por la mañana se encuentra en coma farmacológico y asistencia respiratoria mecánica y en grave estado».

Grave, doloroso; y disparador una vez más de un debate que muchas veces se ha tenido y en el que la sociedad sigue estando dividida:

[Tweet «¿es un error tener armas en nuestra casa?, ¿es inevitable hacerlo frente a la inseguridad reinante?.»]

Pero más allá de la posición individual que cada uno tenga frente a la cuestión, hay cosas que aparecen como inmodificables frente a tantos hechos dolorosos que diariamente aparecen el las crónicas periodísticas con un final tan doloroso como el que hoy nos ocupa. La sociedad civil, esa que dedica su vida a trabajar, a estudiar, a cuidar de sus hijos y su familia, rara vez está preparada para manejar armas de fuego y tal vez por eso tampoco capacitada para tomar las prevenciones necesarias frente al riesgo que suponen.

[Tweet «No se trata de evaluar la capacidad de abrir fuego o  la de manipularlas con habilidad»]

Estamos analizando que ni siquiera sabemos como ponerlas a resguardo del alcance de nuestros hijos.

Por ello lo que debe ocuparnos, unirnos y empujarnos a una acción común es la urgente necesidad de que las autoridades se centren seriamente en la prevención del delito y en la custodia de la seguridad de los ciudadanos. Estas cosas ocurren porque nos sentimos indefensos y porque sabemos que en el momento de necesitar ayuda…no la vamos a tener.

Lo sabemos nosotros y lamentablemente lo saben los delincuentes.

Basta entonces de falsos debates . Es como criticar a quien asiste a un curandero en un país en el que la salud pública es deplorable y la privada es inalcanzable para el 80% de la población.

[Tweet «Es criticar a quien ve a un curandero en un país en el que la salud pública es inalcanzable a casi todos»]

No es a los tiros con los malvivientes que vamos a resguardar a nuestros hijos, sino uniéndonos en una presión constante sobre quienes pueden resolver los temas y no lo hacen.

Que así funcionan las sociedades democráticas, aunque no estemos acostumbrados a disfrutarlas.