Sin embargo, el delincuente detenido fue culpado por el crimen. Las pericias confirmaron que la bala 9 milímetros era policial
La bala perdida que mató casi de inmediato a Sabrina Rojas en el patio de su escuela en Morón era de la Policía. El proyectil, que empezó a ser peritado horas después del fatídico episodio, fue disparado durante una persecución que en la que participaban tres móviles y un auto manejado por delincuentes.
La alumna de 15 años murió el lunes 25 de agosto, hace exactamente un mes. «Tenía una herida a la altura exacta a la altura del corazón», fueron las trágicas palabras que utilizó el subsecretario de Emergencias de Salud del municipio, Carlos Grillo, para describir los últimos minutos de vida de la víctima.
El hecho ocurrió en la Escuela Parroquial Félix Burgos, ubicada en la calle Monseñor Solari al 2700.