Gastos del intendente: cuando solo el papel higiénico se salva

Por Adrián FreijoLos más de $17 millones presupuestados para el área de la Privada del intendente son un ejemplo del ajuste que se le pide a la gente pero ignoran los gobernantes.

Ya ni siquiera se trata de cuestionar los rubros indicados en el presupuesto que para este año 2018 se aprobó para la Secretaría Privada del intendente Carlos Arroyo -lo que ya daría mucha tela para cortar- sino tan solo detenernos en la oportunidad de realizar muchos de ellos en un momento en el que se le pide a la sociedad un esfuerzo titánico buscando equilibrar las cuentas que en General Pueyrredón suponen un déficit que supera los $ 1000 millones.

En el citado instrumento está previsto que se adquieran 5 automóviles por un monto total de $ 2.800.000. ¿Es tan urgente hacerlo?, ¿no se puede esperar mejor oportunidad?. ¿No pueden funcionarios que cobran sueldos que superan largamente los $100 mil mensuales trasladarse en sus propios automóviles?

Y en todo caso…¿es de un republicanismo austero adquirir unidades que superan los $500.000 cada una?.

También en el listado de futuros gastos aparece la compra de 3 Microondas por un valor total de $ 18.000 y de 2 televisores por un monto de $ 24.000. El precio de los primeros parecería indicar que son entregados con la comida incluida para todo el año -el sobreprecio con respecto a lo que se solicita en el mercado supera el 100%- y también aquí debemos reiterar la pregunta acerca de la urgencia en adquirirlos.

Sorprende el monto del dinero que dispondrá el jefe comunal para sus viáticos durante todo el año, cifra que en ese caso es de $ 432.000, lo que representa un gasto de $ 36.000 mensuales. Es decir que el intendente podrá gastar en el rubro el doble de lo que gana en promedio el 82% de la población, mientras que su salario bruto supera los $200.000, casi diez veces más de lo que gana el mismo porcentaje de argentinos.

Entre los gatos más sorprendentes, se encuentran la compra de Tubos Led por $ 17.200; 15 pares de zapatos ($ 55.500); 15 Ambos ($ 67.500); Yerba Mate ($ 15.000), Camisas de vestir por un monto total de $ 10.500; Pantalones ($10.000); Sacos ($15.000); Corbatas ($ 3.900) y Leche ($20.000).

Y si bien en lo que hace a indumentaria debe suponerse que tiene por destino al personal de maestranza que trabaja en la repartición (mozos, ordenanzas, choferes etc.) no podemos dejar de preguntarnos si en un momento de emergencia y ajuste no podría cuidarse un poco más el dinero público.

Porque cada par de zapatos cotiza a $ 3.700 -tal vez se adquieran en alguna tienda de París o en una de las casas del ramo más caras de la ciudad- cada ambo $ 4.500 -más que un traje de buena marca-  y así todos los precios aprobados que claramente superan los que cualquiera de nosotros consigue en un mercado, comercio o tienda de la ciudad.

Donde no hay objeción que hacer es  en los ¡¡¡ $ 30.000 !!! que Arroyo calcula gastar en papel higiénico: el ritmo y nivel de las cag… de la administración hace que temamos que en este rubro se haya quedado corto. Aunque la foto que ilustra esta nota demuestre que no le es fácil.

En resumen… el ajuste, como siempre, es para la gilada.