Se trabaja para terminar el tendido de vías en el ingreso a la Ferroautomotora. En pocas semanas estará concluida la obra, con un pequeño detalle: no hay trenes que lleguen.
Resulta paradójico: aunque cada vez más marplatenses pueden comprobar el avance de las obras ferroviarias, el servicio entre Mar del Plata y Buenos Aires es parcial a raíz de las inundaciones que afectaron la provincia de Buenos Aires.
Pero no por contradictorio deja de ser cierto. En las últimas semanas se acentuaron los trabajos en los pasos a nivel, ejecutados por la unión transitoria de empresas Panedile-Tesur, mientras está suspendido el servicio de las nuevas formaciones del gobierno nacional y Ferrobaires apela a un servicio de emergencia para no dejar sin viaje a los usuarios.
La obra ya llegó a la altura del cruce de Avenida Champagnat. Consiste en la construcción de una doble vía entre la Estación Camet y la Ferroautomotora para dinamizar el ingreso y egreso de las formaciones. Para instalar la segunda vía, las obras requirieron que el Ente Municipal de Vialidad levantara el pavimento en los cruces.
Entre los pasos a nivel, algunos ya están terminados y otros todavía están en obra. En el último mes los trabajos se focalizaron en distintos puntos: el de la calle Chile, el de la Avenida Jara y el de Champagnat.
Con todo, no son los mejores días para quienes acostumbran a viajar en tren. El servicio entre Mar del Plata y Plaza Constitución que presta el Gobierno nacional a través de Trenes Argentinos está suspendido desde que, en agosto, las intensas precipitaciones y la crecida del río Salado dejaron al centro de la provincia de Buenos Aires literalmente bajo el agua.
Si bien la situación más crítica por la crecida del río y su cuenca ya ha pasado, sigue siendo importante el riesgo sobre terraplenes y en especial, sobre el puente ferroviario que cruza el Salado a la altura del paraje Guerrero y que circula paralelo a la autovía 2.
En esa zona se están construyendo dos puentes nuevos: uno, carretero, para reemplazar el viejo de la ruta 2 que sufrió serias averías. Desde entonces fue inhabilitado, por lo que se utiliza el de la mano a Mar del Plata para que circulen los vehículos en ambas direcciones. Esto provoca un serio congestionamiento en el lugar, especialmente durante los fines de semana largos.
El segundo puente que se está levantando es el ferroviario, que reemplazará al antiguo, de hierro. Preventivamente, el puente fue clausurado porque está en duda la estabilidad de los terraplenes, socavados por la enorme masa líquida que se dirigió desde la cuenca alta hacia el mar.
La expectativa es completar el puente carretero para diciembre, cuando se inicie la temporada alta de la costa atlántica. En cuanto al nuevo puente ferroviario, se especula que los plazos se estirarán un poco más.
Mientras tanto, las aguas siguen bajando en los canales y las lagunas que componen el sistema del Salado. La laguna de Chascomús, por ejemplo, disminuyó más de 15 centímetros.
De todos modos, en toda la zona se experimenta un estado de alerta a partir de los pronósticos de precipitaciones en exceso previstas para el último trimestre del año, e incluso para enero de 2016. En las localidades que se vieron comprometidas se están tomando medidas de emergencia destinadas a prevenir cualquier inconveniente en las zonas urbanas y proteger los cascos de las ciudades para evitar riesgos a las personas.