José Cano volverá con su propuesta de Presupuesto Base Cero

Con el presupuesto de este año ya votado el futuro Secretario de Hacienda anunció que para el segundo año retornará el sistema que propone desde hace muchos años.

El concejal de Agrupación Atlántica, José Cano, destacó en Radio Brisas las palabras del actual intendente Gustavo Pulti al reconocer la derrota y decir que se hará una transición con apertura de todas las dependencias, y por otro lado precisó que por los resultados la repartición de los 12 concejales será de 6, 5, y 1. “Es bueno lo que escuché dél intendente. Eso lo destaco”, remarcó.

Cano indicó que van a recibir un municipio en condiciones complicadas en cuanto a los números. “Hemos peleado sanamente para estar en ese lugar y ahora debemos hacernos cargo”, señaló y precisó que “hasta agosto tenemos un déficit de 576 millones de pesos, y un descubierto de 120 millones de pesos para pagar los sueldos. Entonces si se asume el 10 de diciembre los sueldos se pagarán el vienes o lunes”.

También dijo que “vamos a agarrar el municipio con una deuda muy grande con el Banco Provincia”. Pese a este panorama, sostuvo que “el segundo presupuesto será base cero”.

Sobre el gabinete que conformará el nuevo jefe comunal adelantó que “Arroyo va a anunciar en conferencia de prensa su equipo”.

En cuanto a la distribución de los 12 concejales confirmó que “sacamos la cuenta antes de irnos y 6, 5 y 1 esa seria la repartición de los 12 concejales.

El concejal destacó por otro lado que “me alegré mucho de las palabras del intendente (Pulti) que habló de una transición con la apertura de todas las dependencias. Eso es bueno escucharlo y lo destaco”.

Para empezar a solucionar los problemas económicos explicó que “estoy empezando a revisar algunas cosas referidas a decretos, hay que pensar en la auditoria primero, luego en el balance y en el presupuesto. Lo que mas me desvela es la plata para pagar aguinaldos y sueldos”.

-¿Qué es el «Presupuesto Base Cero»? –

Busca reducir gastos sin afectar actividades prioritarias, manteniendo los servicios o minimizando los efectos negativos de la medida.

Suprime las actividades de baja prioridad, algo que ha sido uno de los puntos en los que Arroyo insistió en disentir con la actual administración, buscando de esa forma que no afectan el resultado esperado de la organización.

En caso de requerirse economías mayores, la reducción se extiende a las actividades de prioridad media, tratando de minimizar los efectos negativos de la medida.

En este aspecto será importante observar durante el primer año -en el que la nueva administración deberá moverse con el «viejo» presupuesto ya votado- la reasignación de recursos y el flujo de inversión hacia las obras criticadas durante la campaña -como los polideportivos y el Parque Informático- para ir concluyendo cuales pueden ser declaradas no prioritarias al momento de poner en funcionamiento el nuevo orden económico.

Las experiencias anteriores no han sido exitosas y ello tiene mucho que ver con la dependencia que hasta hoy los municipios tienen de las administraciones nacional y provincial y que muchas veces les obliga a distraer recursos en obras dispuestas desde tales jurisdicciones.

En cualquier caso el Presupuesto Base Cero es considerado una herramienta antigua que en el mundo ha sido desechada desde hace varias décadas.