Por José Luis Ponsico – A los 86 años murió José Varacka, virtual «inventor» de «la cueva», cuando pasó en el´62 al fondo de la defensa. Un compendio, para anticipar, quitar y salir jugando.
José Varacka, ex Independiente, River, San Lorenzo, selección nacional, dos mundiales, virtual «inventor» de «la cueva», cuando pasó en el´62 al fondo de la defensa. Un compendio, para anticipar, quitar y salir jugando. El popular «Puchero» tenía 86 años.
Varacka padeció una serie de trastornos en los últimos dos años. Desde un tumor «de Colon» pasando por caída con fractura de cadera y finalmente un Accidente Cardiovascular la enfermedad conocida como ACV que lo derrumbó. En los últimos años al cuidado de sus hijos mayores y antigua legión suya, Daniel Onega, Luis Artime y hasta Alberto Poletti,
El ex arquero multicampeón de Estudiantes de La Plata, sin haber sido compañero de equipo ni dirigido tampoco por Varacka, estuvo siempre cerca brindándole amparo de todotipo, según los allegados de uno de los hombres de la mutual de los ex futbolistas.
El popular «Puchero» («El sobrenombre me lo puso un empresario de origen judío que tenìa una fábrica de churros en zona de Congreso. Vivíamos en Flores, tenía una hora de viaje y recién me habían probado en 5ta. de Independiente con 16 años. En los terrenos del Bajo Flores me destacaba», le contó al cronista autor de éstas líneas.
«Una tarde, a escondidas, debía ir a Avellaneda, un amistoso con Independiente, no había comido nada y el dueño de la fábrica me pescó comiendo churros en un lugar que no era el mío. «Vos tenés que comer en tu casa. No aquí. Decile a tu madre que te haga puchero», evocó el gran José Varacka
«A los pocos días había un partido de Tercera. Fueron varios compañeros míos hasta Avellaneda para verme. Tuve una buena tarde, el «5» y en la tribuna la barra, la mía, cada vez que cortaba un avance y salía jugando llegaba el grito: «¡ Grande, Puchero!»
«Debuté en Primera, en 1952, en el club ya todos me tenían como «Puchero» Varacka, pibe rubio que las agarra todas en el medio. Nunca más me quité el apodo de encima. En el laburo, los churros duré un año, lo de puchero me acompañó para siempre».
Varacka, 1.85 de estatura, delgado, «5» clásico primero. Inteligente para cortar, buen pase y tranco para empujar a su equipo. Una de las figuras de Independiente que quedó en el recuerdo: los «Diablos Rojos», Micheli, Cecconato, Lacasia, Ricardo Bonelli, Grillo y Cruz. José, un artífice en el medio campo.
Varacka como entrenador vivió dos etapas gloriosas: en el Nacional del 70 puso a Gimnasia y Esgrima en semifinales del torneo (Gatti, Rezza, Goffrit, Roberto Gonzalo, Zywicka, Masnik, Pignani, Pedraza, Onnis, Meija y Castiglia) Un conflicto con la directiva los dejó sin chance.
La otra de José -alejando una leyenda negra, en Barranquilla- dirigiendo a Junior que no podía ganar, con Varacka obtuvieron dos torneos en la difícil Liga colombiana: en 1977 y 1980. Edgardo Cantú, una de las figuras, mucho después, testimonió: «En Barranquilla José Varacka era un semidios».
(*) Columnista de La Señal Medios, Libre Expresión y Mundo Amateur