La inversión extranjera en Latinoamérica omite a la Argentina

En la última década, Argentina captó menos de uno de cada diez dólares de la desembolso extranjero en la región, según un informe de IDESA realizado con datos de la CEPAL.

La Argentina pudo captar menos uno de cada diez dólares de la masa de inversión extranjera que desembarcó en la Región en los últimos diez años a pesar de representar el 14% del PBI. Así lo señaló en un informe el Instituto para el Desarrollo Social Argentino (IDESA), al analizar los datos reportados por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) sobre inversión extranjera directa.

Según IDESA, la Argentina es poco atractiva para las inversiones porque «la violación de reglas se ha vuelto normal», lo que lleva a perder oportunidades de generar empleos que permitan mejorar la situación social. En ese sentido, la consultora económica destacó que la generación de empleos productivos depende del crecimiento económico, este a su vez está ligado directamente a la llegada de inversiones genuinas.

«Por eso, los incentivos para la inversión, tanto de los ahorros internos como de los que pueden provenir del exterior, son claves para cualquier estrategia que apunte a dinamizar la producción y mejorar la situación social», según IDESA. En la década que pasó, Sudamérica recibió un importante flujo de inversión extranjera directa mientras otras zonas como Europa y los Estados Unidos registraron una baja en la recepción de dólares externos por la crisis.

Esto estuvo asociado a los altos precios de las materias primas y la prevalencia de muy bajas tasas de interés en los mercados internacionales, como consecuencia de la crisis financiera mundial que estalló con la caída de Leman Brothers. Se trató entonces de un ciclo muy favorable para la región que está llegando a su fin como lo prueba el hecho de que el flujo de nuevos proyectos de inversión es menos intenso que en años anteriores.

Buenos Aires, NA.