La sociedad en riesgo: atan, golpean y encierran a un fiscal

No fue en su domicilio, ni en la calle donde ya fue intimidado; al fiscal  Fernando Cartasegna lo golpearon y maniataron en su propio despacho de Tribunales. ¿Quién nos cuida?

Tras el ataque y las amenazas que sufrió el último fin de semana, el fiscal platense Fernando Cartasegna apareció herido esta tarde en su despacho de las fiscalías de calle 7 entre 56 y 57.

El fiscal apareció maniatado y golpeado. Según precisó el fiscal Marcelo Romero, que estuvo con Cartasegna tras el ataque, se encontraba en estado se shock y debió ser trasladado al hospital Italiano aunque se encuentra consciente.

«No recuerdo un hecho de semejante magnitud y gravedad institucional como este en la Justicia argentina. Por lo menos acá en La Plata no pasó nunca», agregó Romero.

En tanto, el fiscal Marcelo Martini, cuyo despacho en la fiscalía se encuentra junto al de Cartasegna, señaló que al edifico de calle 56 «puede entrar cualquiera», y consignó que en el lugar no hay cámaras de seguridad.

Cabe recordar que este fin de semana el funcionario que encabeza tres fiscalías (la 4; la 9 -de Autores Ignorados-, y la que investiga delitos conectados con la trata de personas) fue golpeado e intimidado de distintos modos.

Los agresores, tras reducir al fiscal a las condiciones señaladas, dejaron escrito con el contenido de sobres de azucar la palabra «Nisman». Nadie ha podido hasta ahora explicar como hicieron para ingresar al edificio, a la oficina y luego evaporarse sin que nadie haya tomado nota.

-Segundo ataque en pocas horas-

Cabe recordar que este fin de semana el funcionario que encabeza tres fiscalías (la 4; la 9 -de Autores Ignorados-, y la que investiga delitos conectados con la trata de personas) fue golpeado e intimidado de distintos modos.

Cerca de las 6 de la mañana del sábado, dos hombres y una mujer vestidos con viejos uniformes de policía lo atacaron a golpes apenas estacionó su coche en 8 entre 57 y 58. “La mujer hacía de campana, mientras uno me sostenía y pegaba, y el otro, que parecía drogado, iba y venía, también para pegarme”, recordó el fiscal. Según reveló a este diario, el que estuvo todo el tiempo a su lado se encargó de transmitirle los inquietantes mensajes.

“Me decía ‘llevá la causa como te decimos, o bajate; o te metés al baño… ¿cómo ves a tus hijas marchando?’”, relató Cartasegna, quien recién en las últimas horas empezó a relacionar esas imágenes con el fiscal Nisman, muerto de un tiro en circunstancias dudosas. “No lo vinculé hasta que no me imaginé muerto”, reconoció.

Los agresores lo condujeron por la fuerza a un garaje de la cuadra, para continuar con los golpes.

El domingo a la noche Cartasegna estaba en su casa de Gonnet cuando escuchó ruidos y al asomarse vio a su perra labradora tirada en el parque, al lado del alambrado roto. La habían golpeado y tenía sangre en la boca, por lo que el fiscal supone que “intentaron meterse en mi casa y ella lo evitó” a los mordiscones. Lo que sí hicieron los delincuentes fue tirar a la casa lindera al pato que Cartasegna tiene como mascota y recuperó antenoche.

El lunes a la mañana encontró en la puerta de su vivienda panfletos con amenazas de muerte y manchas que parecían de sangre, pero que eran de ketchup, con la leyenda “conozca al próximo Nisman”. Los mismos papeles aparecieron en distintos ambientes de la fiscalía y también, increíblemente, antenoche en la casa de Gonnet, una vez que el caso tenía amplia difusión en los medios nacionales y Cartasegna estaba ya con custodia policial.

Tras las amenazas y ataque que sufrió el fin de semana, a Cartasegna le asignaron como custodia a dos policías de la Bonaerense y uno de la Federal.