El Gobierno ratificó su intención de establecer un techo a las paritarias en torno al 25 por ciento y provocó la primera reacción fuerte de Hugo Moyano, que no tolerará ninguna limitación.
La postura oficial fue establecida por el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, que aseguró que «es posible» que el margen de discusión en las paritarias sea entre el 20 y el 25 por ciento, al tiempo que prometió mejoras en el impuesto a las Ganancias y las asignaciones familiares.
«Eso es posible, no solo porque tenemos este programa antiinflacionario, sino también porque algunas medidas que el Gobierno va a tomar en relación a los impuestos que cargan el bolsillo de los trabajadores», dijo el funcionario al ser consultado en radio Mitre si era probable establecer una negociación salarial con un tope del 25 por ciento.
Triaca admitió que el «sinceramiento» de la economía que lleva adelante el Gobierno «sin dudas que genera tensiones» entre los dirigentes sindicales y empresarios, aunque recalcó que ambos sectores entienden que hay que trabajar para bajar la inflación» porque «le ha metido la mano en el bolsillo a los trabajadores».
La respuesta del sindicalismo no tardó en llegar. «Si quieren limitar las paritarias, que lo digan y empezamos a hablar en otro idioma», lanzó Hugo Moyano, que aunque más moderado que en otros tiempos empieza a mostrar signos de tensión con el macrismo.
«Son expresiones del ministro, son aspiraciones que él tiene pero, cuando llegue el momento, cada organización dirá cuál tiene que ser el tope. El tope no lo puede… Si son paritarias libres, son paritarias libres, ahora, si quieren limitar las paritarias que lo digan: ‘Vamos a limitar las paritarias’. Y, entonces, empezamos a hablar en otro idioma», afirmó.
«Nosotros recién vamos a empezar a discutir en abril. Ahí vamos a ver la inflación y vamos a discutir sobre esa base. Si ellos piensan que la suba de precios va a rondar esos números, está bien, esos serán los montos de la discusión. Pero si no es así, no vamos a discutir los porcentajes que quiere el ministro», advirtió el líder de la CGT Azopardo.
De todos modos, el camionero apostó a la cautela y le pidió a sus colegas de otros gremios que ya amenazan con medidas de fuerza, que no actúen en forma «irracional». «Nosotros en los 90 esperamos un tiempo prudencial para luchar contra Menem y no nos equivocamos», señaló en radio La Red.
Por su parte, el judicial Julio Piumato, uno de los laderos de Moyano, afirmó que «en las paritarias no debe haber ni piso ni techo porque si no, no son paritarias, que los aumentos salgan por decreto». No obstante, el líder de la UEJN se mostró concesivo con la posición oficial y opinó que «no es un momento para que los trabajadores saquen ventaja ante la situación delicada del país. Es un año para no ganar pero tampoco para perder».
Por otro lado, el secretario general de la CTA Autónoma, Pablo Micheli, advirtió que «no se puede firmar un aumento salarial menor al 35 por ciento». «Los trabajadores no podemos seguir aceptando perder poder adquisitivo. Ya venimos perdiendo mas del 13 por ciento del 2013 a esta parte, respecto a lo que se firmó en paritaria y lo que fue la inflación», indicó.