El jugador de Peñarol, Martín Leiva, reconoció que le molestó que la AdC lo citara a declarar por haber dado su opinión sobre la Liga Nacional. «Tengo el derecho de decir lo que pienso», aseguró visiblemente enojado.
Tras haber expresado que la competencia presenta algunas desprolijidades vinculadas con el calendario apretado y la creación de la Liga de Desarrollo sin prever cuestiones de infraestructura y sin consultar con los jugadores, Leiva fue señalado por las autoridades de la Asociación de Clubes y citado, junto a Leo Gutiérrez, por el Tribunal de Disciplina por hacer «declaraciones injuriantes».
En medio de la polémica, Leiva reconoció, en diálogo con Libreexpresion.net, que no le cayó bien que sus declaraciones hayan tenido semejante repercusión. «Me molestó muchísimo todo lo que pasó porque yo tengo un nombre. Soy una persona que está en la Liga hace más de la mitad de mi vida. Hace 17 ó 18 años que estoy jugando. Gané cosas también. En todo momento ensuciaron mi nombre. Lo único que hice fue dar una opinión en base a la Liga y a lo que a mi me parece», afirmó el pivote del equipo «milrayitas».
Y agregó con firmeza: «Creo que tengo derecho a hablar. La Liga también es mía, eh. Y de todos los jugadores. Porque sin los jugadores esta Liga no existiría. Entonces que hayan manchado mi nombre así me molestó muchísimo. Yo no nombré a nadie. Dí mi opinión. Ahora mi abogado va a iniciar acciones legales».
Por último, Leiva pidió que los jugadores sean escuchados y reiteró que recurrirá a la justicia. «Trato de estar tranquilo porque ahora está todo en manos de mi abogado. Tengo un nombre en esta Liga. Usaron mi nombre en declaraciones a los medios y yo no nombré a nadie. Me siento libre de opinar. Este año voy a cumplir 18 años años de Liga. Tengo todo el derecho de decir lo que pienso porque los jugadores somos los que hacemos esta Liga», recalcó.
Por su parte, los dirigentes de Peñarol brindaron públicamente su apoyo a los jugadores del club y, en ese sentido, el abogado Alejandro Amoedo destacó que «incluso es cuestionable la validez del código de ética que la Asociación de Clubes esgrime que está vigente» y agregó que «se trata de una cuestión de libertad de expresión».