El gobierno argentino se ha denunciado la militarización del Atlántico Sur por parte de Gran Bretaña. ¿Porqué los ingleses pueden tener interés en armarse en las islas?
El avión de guerra de fabricación china FC-1/JF-17, en la mira del gobierno argentino
La respuesta obvia, parece ser informes de ICIA desde hace un años donde rescatan la compra de tecnología militar de última generación para la Argentina. Desde al menos 24 aviones Chinos y otros tanto de fabricación rusa, a misiles y la construcción de submarinos nucleares.
Cistina volvió de China a fines del 2014 con una serie de acuerdos económicos, financieros y comerciales. Pero la gira presidencial podría haber incluido una negociación más: la compra de 20 jets FC-1/JF-17 con capacidad para llegar a las Islas Malvinas.
Modelo de helicóptero artillado que intenta comprar la Argentina a Rusia
Ahora se anuncia la compra de treinta helicópteros artillados a Rusia, mientras trasciende la decisión de iniciar ejercicios militares en el Atlántico Sur en conjunto con la marina de dicho país.
Por eso es que resulta un nuevo papelón internacional que el país denuncie la militarización de la zona circundante a Malvinas cuando desde su propio gobierno se fomenta un armamentismo que no sería cuestionable -el estado de nuestras FFAA es realmente lamentable- si no viniese acompañado de una alianza estratégica con Rusia, hoy enfrentada duramente con el bloque occidental, y a China que también muestra interés en aumentar su influencia en la región.
