El marplatense Mariano Mastromarino se mostró emocionado y feliz por su actuación en el Maratón. «Se te pasa por la cabeza toda una vida de atletismo», aseguró en diálogo con Libreexpresion.net.
“Me siento muy feliz porque pude terminar la carrera. Venía muy bien de ritmo y estaba haciéndola como yo quería pero en el kilómetro 30, cuando tenía que empezar a levantar el ritmo me agarró una puntada en el vaso. Recién en el kilómetro 36 se me fue la molestia y pude retomar el ritmo. Estoy muy contento pero a la vez, me queda ese sabor que podría haber llegado un poquito más rápido a la meta», dijo Mastromarino, visiblemente cansado por el esfuerzo.
«La recta final, que parece interminable, se me pasaron millones de cosas por la cabeza como toda una vida atletismo. Toda la gente que me acompañó siempre como mis amigos, mi familia y mis entrenadores Leonardo Malgor y Daniel Díaz. Muchas personas que me apoyan y entienden que nuestro sueño era llegar y lo logramos. Pensar que hace cuatro años estaba en mi casa sin ver los Juegos Olímpicos y ahora estoy acá. Ahora sí puedo decir que soy olímpico. Me tengo que hacer el tatuaje”, aseguró sonriendo con cierto rasgo de alivio.
Además, el Colo recordó el momento en el que no pudo acceder a Londres 2012, un hecho que se convirtió en el principal motor para llegar a estos Juegos: “El día que intenté hacer la marca para Londres 2012 y no la conseguí, esa misma tarde no me quedé en mi casa llorando, sino que fui a lo de Leo (Malgor) y le dije arranquemos a entrenar porque quiero ir a Río. No bajé los brazos, la peleé y acá estoy, luché y llegué”.
A continuación, la charla completa de la periodista Florencia Cordero con Mariano Mastromarino para Libreexpresion.net:
