Bajo esta premisa, UNICEF presentó un «Posicionamiento sobre adolescencia en el país», con información en salud, educación, protección y derechos adolescentes.
Pese a ser una etapa caracterizada por crecientes capacidades, aspiraciones y creatividad, en Argentina la mitad de los adolescentes es pobre, sólo el 45% completa la escuela secundaria y entre los 14 y los 15 años, 1 de cada 6 trabaja.
La adolescencia es una etapa única, caracterizada por un desarrollo cerebral y un crecimiento físico rápidos, aumento de la capacidad cognitiva, el inicio de la pubertad y de la conciencia sexual, y la aparición de nuevas habilidades, capacidades y aptitudes. El proceso de transición de la infancia a la edad adulta está influenciado por el entorno social y cultural, por tanto el propio concepto de adolescencia puede variar en cada contexto concreto. Dentro de esta etapa se entiende el periodo que va de los 10 a los 14 años como adolescencia temprana y el que va de los 15 a los 18 como adolescencia tardía.
«La adolescencia es un período de cambios positivos pero también es un momento de vulnerabilidades particulares del momento de su desarrollo”, indicó Florence Bauer, Representante de UNICEF Argentina. “Muchos indicadores que durante la infancia muestran resultados favorables, empeoran cuando los chicos y las chicas crecen. La educación primaria, por ejemplo, prácticamente es universal pero en la secundaria hay medio millón de adolescentes que no está en la escuela”, explicó. Y agregó “es necesario promover políticas públicas integrales que prioricen a la adolescencia como una población específica”
En la Argentina hay más de 5 millones y medio de adolescentes entre 10 a 18 años. La pobreza monetaria afecta mayormente a éste grupo etario: según UNICEF, 1 de cada 2 adolescentes de entre 13 y 17 años es pobre; entre los 14 y los 15 años, 1 de cada 6 trabaja; entre los 16 y los 17 años, lo hace 1 de cada 3.
Medio millón está fuera de la escuela y solo la mitad de los que ingresa finaliza el nivel secundario. El abandono escolar está fuertemente relacionado con la inserción temprana en el mercado de trabajo, sobre todo entre los varones, y el embarazo entre las mujeres. El 15% de los nacimientos en Argentina son de embarazos adolescentes: 6 de cada 10 no son planificados y 1 de cada 10 mujeres abandona la secundaria por este motivo o porque se aboca al cuidado de sus hijos, hijas, hermanos o hermanas menores.
La violencia y el suicidio, muchas veces vinculado a casos de abuso sexual, son problemáticas que también aborda el«Posicionamiento sobre adolescencia en el país«. Las manifestaciones más graves de violencia tienen lugar dentro de los hogares, ocurren en privado y son difíciles de detectar. Entre los 12 y los 14 años, 1 de cada 3 chicos y chicas sufren castigos físicos por parte de sus padres; entre los 15 y los 17 años, la proporción es 1 cada 4. En cuanto a los casos de suicidio adolescente, en 2015 se registraron 438 muertes de las cuales 3 de cada 4 se corresponden con un varón.
UNICEF alentó el trabajo colectivo de los gobiernos, la sociedad civil, el sector privado, las familias y cuidadores, y las comunidades para la promoción de políticas públicas que contribuyan al desarrollo integral de los y las adolescentes, garanticen los derechos a la inclusión social, la educación, la salud, la protección frente a la violencia, la salud sexual y reproductiva, la protección frente al trabajo infantil, a la justicia y a la participación.-
Informe completo en: www.unicef.org.ar/adolescentes