Por Dimas J. Pettineroli – Estar en la Patria es algo maravilloso e incomparable. Esa sensación de pertenencia que a uno lo repotencia y oxigena los sentimientos nacionales.
Me pedían hablara de lo que estoy viendo en mis primeros días en Argentina.
Con gusto comentare lo que vi y sentí en Buenos Aires y Bahía Blanca. Hable con mucha gente. De todos los orígenes y colores. Escuche, pregunte, sentí. Pude evaluar, como usuario, algunas reparticiones públicas y encontré un burocratismo excesivo. Toxico que le complica innecesariamente y con sadismo la vida a millones de compatriotas.
El primer dato es que realmente hay un gran consenso con el nuevo gobierno a pesar del enojo evidente por el aumento generalizado e inevitable de tarifas, como la eléctrica, contaminada de populismo suicida.
Estoy convencido que Febrero tendrá una inflación en descenso. Y el dólar seguirá estable.
Segundo dato: estuve en la Casa de Cambio Pullman, de Bahía. Y vi que las 60 butacas de la sala de espera están llenas todo el tiempo de operaciones.
Me llamo la atención y profundice.
¿Quiénes son estas personas convertidas en mini operadores cambiarios?
Y la reapuesta es esta. Son ciudadanos que se habían refugiado en el dólar, y que ahora, liberado, retornan a la normalidad y piensan en otros activos. Levantan los colchones y los sacan a “tomar sol” y reactivan el mercado interno.
La mitad compraba. La mitad vendía. Como debe ser en una economía financiera que debe superar la manía verde. Este mecanismo garantiza un mercado auto0alimentado y sin sobresaltos y sin auxilio agudo del Banco Central.
Dato 3: Todo lleno. Hoteles y restaurantes. Transportes full. Hay plata. Hay circulante en poder de los argentinos.
Dato 4. LA GRIETA. Con alegría veo que las polémicas entre los Ultra K y el resto han entrado en una etapa en donde los últimos han dejado de darle importancia y los dejan en el aire. Esto es muy bueno porque elimina stress innecesario.
Sin duda encontré a la gente muy aliviada por las no cadenas presidenciales que quedo claro no sirvieron para ganar.
Dato 5. El Presidente esta muy solo a la hora de informar de sus logros. Lo que se escucha de los ministros en el 90 % de los casos es insatisfactorio. Ojala el cambio también llegue a las vocerias.
Los errores no forzados aparecen por todos lados y en vez de ayudar, debilitan al Presidente.
Soy optimista con lo que he visto. Se viene una Argentina en positivo. No se queden afuera.
En pocos días los estaré visitando.
Abrazo grandote
dimaspettineroli@hotmail.com