El conjunto correntino derrotó en doble suplementario a Quilmes en Mar del Plata por 87 a 80. La figura fue Giordano con 17 puntos y 10 rebotes.
Quilmes fue de mayor a menor, y finalizó con 29 tiros de campo convertidos sobre ¡96 intentos!, 50 de ellos detrás del 6,75. La visita tampoco jugo un buen cotejo, perdió 17 balones y convirtió 4 de 28 tiros de tres puntos. El local volverá a jugar en el Poli el sábado ante San Martín desde las 19, mientras que la visita permanece en la ciudad para enfrentar a Peñarol el viernes desde las 21.
Pelota en el aire para que Quilmes y Regatas abran la velada en la fría noche marplatense. Necesitado, y con el envión anímico que significó el triunfo ante Olímpico, el tricolor pudo establecer la primer diferencia del juego (7-2). La visita reaccionó y con un parcial 8 a 0 logró aventajarse (10-7). Cambiante, intenso y con bajo goleo producto del desorden circunstancial del juego, la primera diferencia a final de cuarto fue visitante, 16-15.
Javier Bianchelli propuso una defensa zonal, y una media cancha con tres tiradores: Ortiz, De La Fuente y Bolívar. Los resultados fueron inmediatos, apenas tres minutos iniciado el periodo, el Cervecero sacó la máxima de 6 (24-18). Regatas tuvo cerrado el aro detrás de 6,75 (1/10 al entretiempo), cometió errores infantiles y perdió la actitud defensiva.
Quilmes fue la contracara. Al acecho del mal momento correntino, sacó su máxima de 12. Sin un líder ofensivo claro, el tricolor optó por tiros de mayor porcentaje y menor dificultad. Rotó el balón, y consiguió que 8 de sus jugadores conectasen con el aro rival. Fue superior como equipo, tuvo la mitad de pérdidas que su rival (4 y 8 respectivamente), y asistió cerca del doble de oportunidades (9 a 5). Al finalizar los primer 20, la renta fue de 7, 37 a 30.
Regatas salió con decisión al tercer cuarto y con Gallizzi como bandera en ambos tableros -9 unidades en el parcial-, estableció un parcial de 9 a 2 para ponerse a una posición (42-39). Quilmes bajó notablemente su porcentaje de campo (5/19 en el periodo), perdió 3 balones en menos de 2 minutos y se vio en desventaja después de largo rato (48-46). Un doble y falta de Paolo Quinteros restableció la máxima para la visita a falta de 1 minuto 45 para el cierre del tercer cuarto. Un par de libres y una conversión a cancha abierta para la visita, un ingreso al canasto de Frazier y una corrección a décimas de Warner le dieron una luz de esperanza al local que perdió el cuarto por 12 unidades. Al último chico la ventaja fue de regatas, por 58 a 53.
El reingreso de Víctor Fernández en la base fue determinante para los Bianchelli, 5 puntos consecutivos del joven de San Nicolás restablecieron la paridad en el juego (58-58). La paridad trajo consigo el nerviosismo. La impaciencia del público con el arbitraje provocó que las pulsaciones fueran aún mayores, Quilmes jugó con el corazón, Regatas con el momento cervecero.
Palo y palo, Quilmes encontró en las manos de Frazier un doble largo que le dio 4 de ventaja a falta de poco más de 120 segundos. El final fue dramático, el mismo extranjero cometió una pérdida infantil que culminó en una sencilla bandeja de Saiz (71-69), y a falta de 80 segundos obligo a Bianchelli a pedir tiempo. Vassirani erró dos libres claves y Quinteros anotó contra tablero para firmar paridad total en los 40 de juego. 71 iguales y a suplementario…
El climax que se vivía en el Poli era tal, que pasaron 2 de los 5 minutos de prórroga para que se abriera el marcador. Dos libres de Paolo y un ingreso por el eje de Giordano le dieron renta de 4 a la visita a falta de 120 segundos. Quilmes se desencontró con el aro (0/7), hasta que apareció un triple salvador de Ortíz que lo devolvió al partido. Mismo protagonista para que todo este como al principio, 75 iguales a falta de 20 segundos.
Giordano tomó el balón, encontró a Gallizi para que este conecte con Quinteros. Reloj en decendente. Paolo y el tiro ganador. Paolo y el soporte para darle la pelota a Quilmes con 8 décimas. Ortiz probó de aro a aro, la pelota voló y voló, y rebotó en el soporte cuando parecía ser el tiro ganador del año, como mínimo. Segundo suplementario y vamos…
Figurita repetida. Regatas logró sacar una luz de ventaja (81 a 76), mientras que el cervecero probó de tres hasta el cansancio sin encontrar puntos. El desorden ofensivo, la urgencia del triunfo y las malas decisiones sentenciaron al local. Perseverar hasta triunfar, el lema correntino. Regatas y un triunfazo en Mar del Plata por 87 a 80.
Informe: Prensa Quilmes