La gente hizo presencia en las calles para marcar la diferencia con quienes rechazan la manifestación popular. En todas las ciudades hubo duelo y esperanza.
En sintonía con todo el país y acompañando la multitudinaria manifestación en Buenos Aires, más de mil personas se convocaron en las calles céntricas de Río Gallegos para manifestar, simbólicamente, el rechazo hacia la actitud autoritaria, el encubrimiento y la falta de respeto del gobierno, ante un magnicidio de características inéditas en el país, como es la muerte de un Fiscal de la Nación, que, precisamente investigaba al Poder Ejecutivo.
Mayormente compuesta por familias y jubilados, acompañadas por gremios y algunos referentes de la oposición política, entre 1.000 y 1.200 personas se concentraron en calles Roca y San Martín, marcharon en silencio por el centro de esta capital, hicieron una parada frente al Juzgado Federal, aplaudieron pidiendo justicia por Nisman. Luego, la columna continuó por Zapiola hasta Errázuriz y de allí retomó Roca nuevamente, para detenerse frente al Tribunal Superior de Justicia donde repitieron las manifestaciones de pedido de justicia y dejaron escuchar un cerrado aplauso.
Finalmente regresaron al punto de encuentro en Roca y San Martin, allí los presentes realizaron un minuto de silencio, se izó una bandera nacional a media asta y posteriormente, se entonaron las estrofas del himno nacional para desconcentrarse pasadas las 18:50.
La pancarta que encabezó la marcha, decía “Por una Justicia Independiente”. También hubo carteles pidiendo justicias y otros con la leyenda “Yo soy Nisman”.
La ausencia total de Fiscales y autoridades judiciales no es casual. De acuerdo a lo que se pudo rescatar de testimonios en off, por parte de integrantes del gremio de Judiciales, agrupación que estuvo apoyando el reclamo en todo momento “los fiscales, como los jueces, cumplen las órdenes dadas por Pablo González, (senador del FPV) quien se aseguró que nadie participara”, le confiaron a nuestro cronista.
En tanto, algunos con radios encendidas en medio de la marcha, seguían las alternativas de los sucesos en Buenos Aires y en otra parte del país e inclusive en el exterior. Las manifestaciones de los concurrentes mayormente hicieron eje en tres aspectos: pedido de justicia por Nisman, fin del hostigamiento gubernamental al poder judicial y rechazo a las actitudes autoritarias y antidemocráticas del gobierno.
En Santa Cruz fueron varias las manifestaciones de apoyo y solidaridad, entre las más representativas, las de Río Gallegos y Caleta Olivia, donde la gente se movilizó en perfecto orden y donde no se generaron incidentes. (Agencia OPI Santa Cruz)