El cuerpo que apareció calcinado a metros de la casa del fiscal Alberto Nisman horas después de se muerte, pertenece a una mujer de 41 años que se dedicaba…al mismo trabajo que Lagomarsino
Según trascendió en las últimas horas, a través de su cuenta de tuiter, la doctora en derecho, Gabriela Alonso, reveló que el cuerpo que apareció calcinado aquél 16 de febrero a metros de la subestación eléctrica situado en el predio de Avenida de los Italianos y Parque Lynch -frente a Le Parc-, pertenecería a Alejandra Beatriz Ravenna, de 41 años, aparentemente soltera.
Este sería el cuerpo tal como apareció en la madrugada del 16 de febrero de este año.
Esta mujer era socia con su hermana, Vanesa Laura Ravenna, de 39 años, en la firma SEDEMI SRL, una sociedad que tiene actividades que, a la vista de los investigadores, podrían estar relacionadas con las tareas que el único imputado en la Causa Nisman, y la última persona que lo vió con vida además de facilitarle el arma con la que lo mataron o se mató, Diego Lagomarsino.
La firma SEDEMI se dedica a “servicios de microfilmación y digitalización de documentos, guarda y custodia de documentos de terceros”. La misma actividad que Lagomarsino desarrollaba para el fiscal.
Hubo un testigo de la aparición del cuerpo calcinado: un vecino advirtió a la Policía y ésta a su vez dio aviso al SAME. Por esos días el titular del servicio de emergencia sentenció que el deceso se produjo por una electrocución. Sin embargo la empresa EDESUR, a quien le pertenece la subestación, negó que se haya producido por una falla eléctrica.
Pero también en su momento el periodista Jorge Asís había sostenido que en el departamento de Nisman no había un solo muerto sino dos y se preguntaba si el cadáver ahora identificado no sería el de aquella segunda víctima.
¿Se abre otra puerta de esta rara historia?, ¿o solo se confirma lo que muchos suponían acerca de una participación mayor de Lagomarsino en los hechos que culminaron con lo que sería el mayor magnicidio de la historia argentina?.
¿Se hará la luz?