Un pequeño tsunami que puede convertirse en hecatombe

La caída de la economía China y las dudas de la FED para subir las tasas componen un cóctel de incertidumbre que arrastra la economía mundial. La nueva crisis griega también empuja.

Los principales mercados bursátiles del mundo cerraron ayer una semana marcada por la incertidumbre. Factores como la debilidad de las economías emergentes, la convocatoria de elecciones anticipadas en Grecia o las dudas de la Reserva Federal para subir los tipos de interés han teñido de rojo las principales plazas bursátiles la tercera semana de agosto, en la que el mercado ha reflejado la posibilidad de que la economía mundial sufra una desaceleración.

Tras cerrar Wall Street el jueves con pérdidas del 2%, las mayores en un año y medio, la tendencia bajista se prolongó durante la sesión ayer, en la que las ventas volvieron a monopolizar la mayoría de Bolsas del mundo. El principal afectado fue, de nuevo, el mercado asiático, donde los inversores reaccionaron con incertidumbre ante el retroceso del sector manufacturero chino y los efectos tardíos de la devaluación del yuan. El índice de Shanghái, referencia en el gigante asiático, se derrumbó un 4,27%, mientras que en el de Shenzhen la caída fue incluso mayor, de un 5,42%.

El movimiento arrastró a otros índices del sureste asíatico. Hong Kong cosechó pérdidas por quinta jornada consecutiva (-1,53%) y retrocedió a niveles de mayo de 2014. Japón, por su parte, perdió un 2,98%, la segunda caída más abultada de todo 2015. Además, la amenaza de Corea del Norte, que ayer declaró el «estado de preguerra» en la frontera con Corea del Sur provocó que la Bolsa de Séul perdiera un 2,01%.

Los últimos datos arrojados en las últimas semanas por China reflejan el difícil momento que están atravesando los emergentes. Con Rusia y Brasil casi en recesión y mostrando una gran volatilidad, Pekín ha tenido que llevar a cabo decisiones controvertidas, como la devaluación de su moneda o la toma de posesión del mercado de valores, después de ofrecer claros síntomas de que su crecimiento sufrirá un frenazo en 2015.

José Luis Campuzano, estratega jefe de Citi, considera que la situación de China se ha producido debido a un escenario de «desecelaración económica» que, sin embargo, afirma, «está controlado». «La economía china necesitaba medidas económicas monetarias bruscas, por lo que la depreciación puede provocar unamejora de las previsiones», afirma Campuzano.

Además de la inestabilidad vivida durante las últimas semanas en China, otros factores determinaron las fuertes caídas en Bolsaproducidas ayer. En Europa la inestabilidad política de Grecia volvió asembrar la incertidumbre en los mercados de valores. La desintegración del Gobierno de Alexis Tsipras y la convocatoria de elecciones para el próximo 20 de septiembre tuvo su respuesta ayer en las principales plazas bursátiles que se sumaron a la tendencia bajista mostrada por el resto de parqués mundiales. El Ibex entró ayer en pérdidas anuales tras ceder un 2,98%. Los números rojos también se mostraron en otras plazas, como París (-3,19%), Fráncfort (-2,95%),Milán y Londres (-2,83%).

La falta de determinación de la Fed están marcada por la evolución de la inflación, que se mantiene muy alejada del 2%marcado para llevar a cabo la primera subida de tipos de interés desde 2006. Los precios se han visto condicionados por la evolución del coste del petróleo, que acumula una caída casi continua desde hace dos meses, y está permitiendo mantener las políticas expansivasllevadas a cabo por la mayoría de Bancos Centrales durante el 2015.

Previsión de futuro

Jaime Díez, analista de XTB, considera que muchos inversoreshan «vaticinado» un retraso en la decisión de subir los tipos de interés, un hecho que podría acarrear un «impacto directo» en la posición mundial de Estados Unidos. «Si la Reserva Federal se deja condicionar por la devaluación del yuan y decide retrasar de nuevo la subida de tipos, EE.UU. pasaría a un segundo plano en su posición de dominio». Además del componente económico, el analista de XTB cree que esta decisión supondría una demostración de fuerza por parte del organismo estadounidense.

En cuanto al retroceso de las principales Bolsas del mundo, Díez considera que el mercado de valores se vio condicionado ayer por «diversos motivos», que provocaron la «pérdida de soporte técnico» en un buen número de índices. Además, según el analista, la caída del sector manufacturero chino  demostró que la depreciación del yuan «era una medida necesaria» para revitalizar la economía asíatica, pese a que la depreciación podría repercutir a largo plazo en una pérdida de competitividad de las exportaciones europeas