Pablo Gianelli dejó «La Feliz» para trabajar en el cuerpo técnico de un equipo de voley de la Liga de Qatar integrado por jugadores de las nacionalidades más diversas.
Siempre quiso salir al mundo para codearse con el ambiente del profesionalismo en el deporte en otros países. Y prácticamente de un día para el otro surgió la propuesta de viajar a Doha para sumarse al trabajo del equipo de voley de la policía que participa en la Liga Qatarí.
Pablo no lo dudó y aceptó encarar una tentadora propuesta internacional. Como preparador físico ya había sido parte del proyecto Buenos Aires Unidos en la Liga de Argentina, además de contar con una valiosa experiencia en Mar Chiquita Voley.
Tras «dar el sí» a la distancia, sólo quedaba esperar indicaciones para iniciar el gran viaje. Y así fue que un día, a las 6 de la mañana, Gianelli se enteró en Mar del Plata -a través de un mensaje que leyó en su celular- que ya tenía sacado su pasaje para viajar a Qatar ese mismo día a las once de la noche.
Hizo las valijas, se despidió de quienes pudo y partió hacía Doha para empezar a desempeñarse en su nueva tarea dentro de un contexto muy diferente al que estaba acostumbrado.
En Qatar, Pablo Gianelli se encontró con un mundo nuevo y apasionante en el que puede aprender permanentemente cosas nuevas de su profesión y de la vida de inmigrante para crecer en lo personal y en lo profesional.
En diálogo con la periodista Florencia Cordero en el programa Un Lugar en el Mundo de Radio Brisas, el PF contó desde Doha los detalles de una enriquecedora experiencia en una cultura totalmente distinta.