Omar Darouiche dirige un sitio de internet con valiosa información de primera mano para orientar a quienes busquen viajar a Irlanda para estudiar o trabajar. Afirma que últimamente se incrementaron las consultas de manera notoria.
Después de vivir durante diez años la experiencia de ser inmigrante en Dublín, el argentino Omar Darouiche se dedica a aconsejar a otros compatriotas y latinos en general sobre las posibilidades que se presentan para extranjeros en Irlanda.
Llegó con la idea de probar suerte a través de una visa de trabajo temporal y se fue ganando un lugar en el mundo laboral irlandés por su buen desempeño en el rubro hotelero. Pero antes de lograr cierta estabilidad tuvo que apelar a otros recursos para conseguir dinero. Por ejemplo, cuando estaba por quedarse sin plata, decidió comprarse una pala y ofrecerse para sacar la nieve de la puerta de los negocios.
Buscando un lugar para vivir en una ciudad que tiene poca oferta de vivienda y mucha demanda, optó por alquilar un cuarto en la casa de una inmigrante boliviana que con el tiempo se convertiría en su mujer. Así fue como Omar Darouiche, un argentino que estudiaba Ingeniería en Córdoba, y Diana Viveros, doctora de profesión con experiencia en Salud, Marketing y Negocios, empezaron a forjar una vida juntos hasta formar su propia familia en Dublín.
Con compromiso y responsabildiad basada en las viviencias personales, un argentino y una boliviana que llegaron a Irlanda con mucha ilusión encararon un emprendimiento que ofrece información calificada de primera mano a través de la página web Argentinos en Irlanda y sus respectivas redes sociales que se complementan con el proyecto Mundo Formativo, una agencia educativa cuya misión es asesorar a potenciales estudiantes interesados en vivir una experiencia internacional que contribuya a su desarrollo personal y profesional.
En diálogo con la periodista Florencia Cordero en el programa Un Lugar en el Mundo de Radio Brisas de Mar del Plata, Omar Darouiche narró los detalles de su experiencia como inmigrante argentino en Dublín y alentó a todos los que quieran animarse a conocer la idiosincracia de Irlanda a través de la posibilidad de conseguir una beca de estudios o un trabajo temporario que les de la chance de probar.
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