El gran cantor argentino Guillermo Fernández habló en el programa Un Lugar en el Mundo por Radio Brisas de su propia historia de inmigrante con el tango como bandera a lo largo de toda su trayectoria.
Desde muy chico se hizo conocido cantando tangos en televisión. Aquel pibe al que todos llamaban «Guillermito» abrazó el tango desde el principio y ese romance duró para siempre.
Pero como una consecuencia lógica de una natural búsqueda interior y ansias de superación profesional, Guillermo Fernández inició su propio camino lejos de casa para incursionar en nuevas experiencias musicales en Estados Unidos.
Como él mismo cuenta en su actual espectáculo, los tangueros de entonces lo criticaron porque había -supuestamente- abandonado el tango, pero la realidad es que la pasión por nuestra música ciudadana por excelencia nunca se diluyó. Al contrario, a miles de kilómetros de distancia, Guillermo potenciaba su amor por el 2×4 cada vez más, hasta que por fin llegó la hora de volver a Argentina y demostrar su madurez con la música.
Celebrando en Mar del Plata sus 50 años con la canción, Guillermo Fernández habló en el programa radial «Un Lugar en el Mundo» sobre su valiosa experiencia como argentino en el exterior y -tras varios años de haber emprendido el regreso- muestra su inocultable orgullo por haber nacido en esta tierra donde la música popular se llama tango.
A continuación, una imperdible charla con la periodista Florencia Cordero en Radio Brisas en la que también habló de su amor por Mar del Plata..
Fuente: Un Lugar en el Mundo