La primera consecuencia de la irrupción del gigante asiático en América Latina podría afectar seriamente nuestra economía. China nos suplantará en la venta de carne a Brasil
medida que crece la economía china y su clase media se agranda, cambia su alimentación. Por ejemplo, China desea comer más carne vacuna.
Actualmente, la importación de productos agroalimentarios es el doble que sus expo: US$135.000 millones en 2014.
En Montevideo, en diálogo con el programa Tiempo de Cambio, de radio Rural, el broker Daniel Castiglioni dijo, desde China: “Me han comentado que la prioridad de las empresas chinas será comprar carne brasileña para ganar producto y mercado rápidamente en la carne de ese origen”.
Castiglioni reconoció que la carne brasileña ya está ingresando “por la puerta de atrás”, es decir, por Hong Kong.
China cerró su mercado a la carne brasileña en diciembre del 2012 debido a un caso atípico del ‘mal de la vaca loca’.
Pero China anunciará en mayo la reapertura de su mercado a la carne vacuna brasileña tras 2 años y medio de veda por razones sanitarias.
Sin embargo, Castiglioni advirtió: “Hay que esperar porque lo dicen todos los años y no pasa nada”.
La decisión acerca de Brasil debería difundirse el 19/05, cuando el premier chino, Li Keqiang, visite Brasil, reportó el diario Folha de S.Paulo.
China es el principal destino de la carne vacuna uruguaya. Al 11/04, compró 36.067 toneladas –peso canal– por un total de US$ 110,56 millones, según datos del Instituto Nacional de Carnes (INAC). Le siguen USA, con 24.370 toneladas; y la Unión Europea, con 14.623 toneladas.
El broker uruguayo reconoció que un corte popular como el garrón, que Uruguay lo vende a US$ 5.000 la tonelada, en el caso de Brasil lo cotiza a US$ 3.800 la tonelada. Aunque aclaró que a los US$ 3.800 hay que agregarle “un costo por hacerle el trabajo del ingreso a China”.
En julio de 2014, el Ministerio de Agricultura y Ganadería de Brasil -mayor productor mundial de carne bovina- dijo que con la reapertura las exportaciones brasileñas podrían llegar en 2015 a US$ 1.200 millones.
Se prevé que Brasil y China firmen un nuevo protocolo sanitario, que hará más rígido el sistema de rastreabilidad animal para la exportación.
Según Folha, el protocolo exigirá que sólo se podrán exportar bovinos con menos de 30 meses.
Actualmente, son 8 los frigoríficos brasileños habilitados para exportar a China.
De entre los principales centros a los que recurren para este abastecimiento, cabe destacar, Brasil, Argentina, Uruguay, Chile y Perú.
Uruguay, es el 2do. en abastecer de este producto cárnico al mundo asiático. Tan solo le supera Australia. Argentina se coloca en 4ta. posición. La Embajada de dicho país en Beijing, ha dejado patente estos días que la compra de carne bovina deshuesada y congelada, tuvo un aumento en 2014 respecto del año anterior, de un 96%.
