El calvario de un marplatense enfermo de COVID para ser atendido

RedacciónPuede parecer solo una historia en medio de tantas que conocemos de este tiempo. Sin embargo merece una reflexión que nos haga saber donde estamos parados.

Nelson Ramon Pizarro es uno de los más de 15.000 marplatenses confirmados como positivo de COVID-19 desde el inicio de la pandemia. Y como tantos otros vive un calvario interminable, trasladándose penosamente de un lado a otro sin lograr una internación que lo ponga en las manos adecuadas, con la medicación necesaria y los cuidados que requiere el momento que está transitando.

Cintia y Nelson en los días felices

Y también como ocurre en estos casos, su familia padece la ansiedad y la impotencia de no saber como terminará todo. Su estado se complica día a día, las respuestas del sistema de salud son insuficientes y el dolor da paso a la bronca que despierta la insensibilidad de quienes deben atender a quien pasa por estas circunstancias.

Su esposa Cintia Díaz nos cuenta que «la fecha en la que el se hisopó fue el 27 de agosto, ya venía con síntomas compatibles con el virus,  y el 1 de septiembre le confirmaron el positivo. Sin embargo los médicos del HIGA dijeron que no presentaba un cuadro de internación y lo dejaron en casa».

Nos cuenta que «la fiebre seguía muy alta, le costaba respirar, tenía dolores insoportables en el abdómen y orinaba de color negro. Además, y pese al diagnóstico positivo, no le dieron ninguna medicación«.

Ante este panorama acudió a la Sala de Salud del barrio Las Américas «donde me atendieron con gran humanidad y preocupación» y recurrió luego al CEMA en donde el 6 de setiembre la Dra. Mariana López, ante la gravedad del cuadro, solicitó la inmediata internación en el HIGA por un cuadro de neumonía y dificultad respiratoria.

Tras largas horas de espera en la guardia Nelson fue internado pero ahí no terminaron sus males. «Pasaba el día sin que nadie lo revisara, estaba en una sala con la puerta cerrada, sin agua y si n atención alguna» denuncia Cintia. «En vano yo pedía que le hicieran estudios, análisis…que lo atendieran».

El pedido de internación que firmó el CEMA ante la gravedad del cuadro

Tras varios días de internación se le realizaron estudios, incluida una ecografía, y  fue enviado nuevamente a su domicilio pese a que los síntomas lejos de ceder se habían agravado.

Y allí no aguantó ni 24hs: ayer, con fiebre, una hinchazón y erupción en sus miembros inferiores y dolores agudos en todo el cuerpo debió ser trasladado nuevamente al nosocomio. Desde su llegada en las primeras horas de la tarde y hasta entrada la mañana de hoy se encontraba en la guardia, sin poder contar con una cama de internación y en condiciones que agigantan la preocupación de sus familiares.

Casi dos meses después de ser detectado como positivo Nelson Ramón Pizarro sigue sin recibir la atención adecuada mientras el aire se llena de discursos vacíos, peleas infantiles entre dirigentes y eternas promesas de solución que nunca llegan a cuajar en realidades.

Una historia con nombre y apellido y un sufrimiento inhumano que sirve como muestra de lo que viven tantos marplatenses día a día.

Una verdadera vergüenza…