La estrategia electoral de Mauricio Macri deberá ser juzgada en base a resultados. Estuvo en la ciudad y presentó la bi-candidatura de su espacio que encabezarán Carlos Arroyo y Vilma Baragiola.
“Les agradezco a Vilma y a Carlos que se sumen al cambio”, fu la frase de Mauricio Macri para intentar mostrar un camino conjunto de los dos dirigentes marplatenses. Pero en ese contexto es claro que el líder del PRO no cuenta con la información suficiente para saber que esa suma es sólo la estrategia que cada uno de ellos ha elegido para llegar al poder. El cambio, en todo caso, sería visto por Arroyo y baragiola como la posibilidad de ganarle a Pulti.
Macri señaló que “es una alegría y es positivo que Baragiola y Arroyo compitan en las Paso del Pro” y que la concejal radical y el líder de la Agrupación Atlántica “tienen una experiencia valiosísima, trayectorias importantes y un destacado compromiso con la comunidad. Hace tiempo que vienen defendiendo propuestas e ideas. Vienen batallando por valores importantes. Eso es lo que proponemos desde el Pro nacional”.
“Hay un espacio para trabajar juntos, independientemente de lo que elija la gente. Todos vemos un objetivo superior. Todos sentimos que tenemos poner el hombro para hacer finalmente de la Argentina el país que soñamos. Podemos lograr eso” continuó, dando a entender que cualquiera sea el resultado ambas fuerzas integrarán un gobierno de coalición.
Algo que genera los primeros escozores, sobre todo en el radicalismo, conciente como es de las miradas diametralmente opuestas que ambas agrupaciones tienen sobre los temas de la ciudad.
«No somos lo mismo en la idea acerca del papel del estado, estamos en veredas opuestas en las cuestiones vinculadas a derechos humanos, no coincidimos ni un ápice en lo que tiene que ver con la administración de recursos y sobre todo somos blanco y negro en materia de mirada sobre la libertad de las personas», decía después de la conferencia un dirigente muy cercano a Baragiola que, irónicamente, teminó diciendo que ello era así «al menos que Arroyo, a la vejez viruela, haya resuelto convertirse en un demócrata».
Para finalizar, Macri puntualizó que “Mar del Plata ha dejado de ser la ciudad feliz que todos decían”. “Esta mesa refleja que se quieren hacer las cosas bien para que la gente viva mejor. Vamos a ganar en el país, en la provincia y en Mar del Plata”, dijo el precandidato a presidente.
