El «Lobo» Fischer hizo «la bicicleta» y se fue a golear al cielo

Por José Luis Ponsico (*)Rodolfo José Fischer, nacido en Oberá, Misiones, el 16 de julio del 44 tenía 76 años. Fue un delantero con una potencia física especial y un olfato de gol que lo hizo distinto y lo hizo ídolo de San Lorenzo de Almagro.

 

José Luis Ponsico

El mensaje llegó por Juan Carlos Guzmán. La popular «Garza» líder de los Futbolistas Solidarios, de amistad -aunque fueron rivales- con el «Lobo» Rodolfo Fischer: «Una mala noticia: murió el Lobo Fischer», decía

Enseguida, Alberto “Toscano» Rendo, el más amigo de Fischer desde los inolvidables «Matadores» de San Lorenzo, memorable campaña del Metropolitano del 68. Aquella final con Estudiantes de La Plata, en River. El gol de Fischer, minuto 115

«Estaba muy mal de salud. Llevaba ocho meses internado. Padecía un severo cáncer estomacal» completó Guzmán, ex central de Chacarita Jrs. Independiente y River. Más de una vez desairado por Fischer, en intensos cruces hace medio siglo

Potencia y frialdad para dejar atrás a Gatti y marcar contra River

Rodolfo José Fischer, nacido en Oberá, Misiones, el 16 de julio del 44 tenía 76 años. Un metro noventa, físico imponente. De tranco y potencia física, sin ser un negado con la pelota. Se adelantó por su perfil zurdo doce años a Mario Alberto Kempes.

Llegó a San Lorenzo en el 63 con 18 años. Tiempos de «Los Carasucias» de Boedo Con Narciso Horacio Doval, Roberto Telch, Fernando Areán, Héctor Rodolfo Veira y el marplatense Victorio Casa. El «Lobo» estaba detrás de ellos

«Lo de Lobo en una práctica. Porque Fischer no hablaba demasiado. Más bien serio. Concentrado. Pudo ser el «Toti» (Carlos) Veglio. Es un Lobo estepario, parece que dijo el ex 9 de Deportivo Español y quedó para siempre», resumió Rendo

«Cuando iba por la raya izquierda y el central debía salir a buscarlo, por su fuerza y velocidad, imparable. En el 67, 68 empezó a hacer la bicicleta. Pasaba la pierna izquierda por encima y la llevaba con la derecha. No podíamos pararlo», dijo Guzmán

Con su gran amigo «Toscano» Rendo y su compinche el Bambino Veira

Con Juan Carlos Lorenzo como DT en su segundo ciclo en San Lorenzo, Fischer con 20 años debutó en el 65. Estaba en la Tercera. A veces la Reserva. Hacía goles y ya pintaba como delantero imparable.

En el 66 convirtió siete goles. Entrando y saliendo. En el 67 metió 18 goles. Ya era Fischer. Previo «Los Matadores». En el 68 trece goles y el título. En el 69, 24 partidos convirtió 22 goles. En el 70, dieciséis goles.

Gran año en el 71, convocado a la selección nacional. Convirtió 27 goles quedando cerca de Carlos Bianchi, el gran artillero del año. Anotó 36 en Vélez que perdió un partido imposible en el «Viejo Fortín» contra Huracán. El 1-2 se llevó el título del Metro

Otro del combo de La Casa del Futbolista que frecuentaba por fono a Fischer, el llamado arqueólogo del grupo: el coleccionista Jorge Marti. Cercano en afectos a Antonio Garabal, además vecinos en Caballito y a la Garza Guzmán

En la Selección con laderos como Bianchi, Brindisi y Pastoriza

Marti le mandaba videos. Goles del «Lobo» Fischer. Aquella escapada por izquierda eludiendo con «bici móvil» a Rubén Suñé, en el 69, lateral de la selección nacional. El centro fuerte a la carrera. Veglio bajándola con el pecho y clavando el segundo

San Lorenzo ganó 2 a 0 al Boca de Alfredo Di Stéfano. La hinchada azulgrana ya deliraba cada vez que Fischer metía «un cambio invisible» y se tornaba imparable, como «pintó» Guzmán. San Lorenzo en Avellaneda, eliminó a River: 3 a 1. Semifinal, Metro´68.

En dos ciclos la rompió entre 1965-72. En Brasil figura en el Botafogo, previo paso por la selección donde convirtió siete goles entre 1970 y 71.  Un equipo que tenía atrás al «Turco» César Laraignée. Adelante, Bianchi y Norberto Madurga. Todos transferidos al exterior.

El Botafogo carioca también disfrutó de sus goles

Entre sus recuerdos, dos goles a Huracán en el debut 1965, la gran jugada en el «Viejo Gasómetro» contra Boca, de pié a pié con «la bicicleta» que se la pedían en las reuniones de la mutual. Para ser aplaudido.

Goles a Antonio Roma, a Amadeo Carrizo, a Hugo Orlando Gatti, a Rubén Sánchez, a Carlos Adolfo Buttice, estando «Batman» en Huracán en del 65. El más recordado a otro «Turco» Alberto Poletti,

Memorable final en el Monumental de River. Corrido a la derecha con poco ángulo, la clavó arriba. En el minuto 115 y Estudiantes «fundido». Estaba disputando la «Copa Libertadores»

Fischer vivía en el Gran Buenos Aires. Tenía también relación de amistad con otro notable goleador sanlorencista: el Gringo Héctor Scotta. Entre ambos casi 400 goles.

En sus últimos tiempos de jugador vistió la verde de Sarmiento

La estadística muestra al «Nene» José Sanfilippo con 205 goles en  6 años (1956-62). El notable Rinaldo Martino, popular «Mamucho» de los 40, con 142 goles. Otro que los hizo en seis años (1944-49). Luego Rodolfo Fischer 141. Y cerquita el Gringo Scotta. Artillero de 60 goles en una temporada: Metro y Nacional´75. Un coloso.

Un fútbol que no volverá. «Matadores» como Fischer y Mario Alberto Kempes, parece como algo difícil de volver a ver. Grandotes con habilidad lanzados en velocidad. Con la zurda lista para «liquidar». El Lobo Fischer vivirá en los corazones azulgrana.

 

(*) Columnista de La Señal Medios, Libre Expresión y Mundo Amateur.