El saldo comercial ya está al nivel de la crisis del 2001

Son datos del INDEC. Las ventas cayeron 11%, básicamente por el menor precio de las materias primas. Se exportaron 15% menos de productos industriales.

En 2014 el superávit del comercio exterior fue de US$ 6.686 millones, un 17% menos que el resultado de 2013, que totalizó US$ 8.005 millones: son US$ 1.319 millones menos, según los datos informados ayer por el INDEC. Se trata de la mayor caída del intercambio total desde la crisis internacional de 2009. Y hay que retroceder a 2001 para encontrar un excedente comercial tan bajo. Estos números adversos se produjeron a pesar de que, por la recesión y las restricciones oficiales, Argentina siguió importando menos.

Las compras externas cayeron el año pasado el 11% o US$ 8.407 millones. Y las exportaciones, por la falta de insumos, menores precios internacionales en especial en bienes primarios, y caída de la demanda externa, totalizaron US$ 9.725 millones menos, una caída de 12 por ciento.

La mayor caída exportadora se verificó en los productos primarios (20%) repartidos en una baja de los precios del 12% y una caída del 9% de las cantidades exportadas. El rubro “cereales” encabezó por lejos el bajón exportador con un descenso del 35% o US$ 3.000 millones menos, liderado por el maíz con US$ 2.270 millones, seguidos por “semillas y frutos oleaginosos” ( 10% o casi US$ 500 millones menos).

También el sector de alimentos tuvo una caída exportadora promedio del 3%, con retrocesos en carnes, lácteos, frutas secas, grasas y aceites, azúcar, bebidas. Y aumentos en pieles y cueros, café, te y molinería.

La industria fue muy afectada con exportaciones un 15% inferiores a las de 2013, liberado por el ramo automotor (18%) seguido por el de maquinarias y aparatos (18%) y caídas en calzado, papel, textiles, metales, caucho, cuero, vidrio y vehículos de navegación aérea y marítima.

Según la consultora Abeceb, “una parte importante” del retroceso exportador industrial “se explica por los menores embarques de vehículos automotores y sus partes a una deprimida economía brasileña. Adicionalmente, las ventas manufactureras se vieron afectadas por la apreciación del tipo de cambio real a causa de la inflación local y la consecuente pérdida de competitividad”.

Por último, “Combustibles y Energía” tuvo un descenso de 18% por menores exportaciones, por precios y cantidades, de petróleo crudo, carburantes y aceites.

La consultora abeceb señaló que “durante 2014 continuaron vigentes los controles sobre las importaciones. No obstante algunas cuestiones cambiaron. Del modelo de control basado estrictamente en las Declaraciones Juradas a la Importación (DJAI’s) se pasó a un esquema más complejo en donde además de la Secretaría de Comercio intervienen en forma integrada la AFIP y el BCRA”.

La factura energética importadora sumó US$ 10.903 millones, un 4% menos que en igual lapso de 2013. Así, la balanza energética terminó con un déficit de US$ 6.243 millones de dólares, 7% mayor al de 2013. Las exportaciones sumaron US$ 4.660 millones y las importaciones U$S 10.903 millones. En 2013 ese déficit fue de US$ 5.832 millones.