Siguen los casos de justicia por mano propia, que demuestran la furia de la gente pero también la sensación de falta de justicia. Ahora fue en Tucumán y el delincuente murió.
El patio de la casa de César Daniel Jiménezaún estaba ayer a la tarde con parte de la decoración del bautismo de su beba de tres meses. Al mismo tiempo que iban descolgando los elementos de la ornamentación, los familiares del hombre que tenía 31 años movían sillas y acomodaban muebles para el velorio.
Jiménez falleció ayer a las 11 en el hospital Padilla. Cinco horas antes había recibido un disparo en la cabeza de uno de los dos asaltantes que intentaba quitarle la moto a su hermano. Ese delincuente fue atrapado por los vecinos y los allegados a la víctima, que lo golpearon hasta dejarlo moribundo. La Policía llevó al ladrón al Centro de Salud, donde murió. Fue identificado como Gustavo Daniel Guerrero.
Ricardo Acosta, tío de Jiménez, comentó que el sábado a la noche se realizó la fiesta de bautismo en la vivienda ubicada en Magallanes 2.682 (casi esquina con Coronel Zelaya) en el barrio Soberanía Nacional. Alrededor de las 5.30, Alexis Jiménez, el hermano de la víctima salió en la moto para llevar a su novia a su casa, y cuando regresó a los pocos minutos lo abordaron dos hombres armados.
“César salió y les gritó. Empezó a forcejear y se escucharon los disparos”, relató Acosta. Mario Sánchez, que vive al lado de la casa de la víctima, se despertó por los gritos y por las detonaciones. Fueron cuatro disparos, uno de los cuales le dio en la nuca a Jiménez.
“Llamé a la ambulancia y a la Policía. Como no venían, le toqué la muñeca para ver su pulso y vi que estaba lento. Entonces les dije que lo subamos a la camioneta”, contó Sánchez.
Ladrón abatido
Los dos asaltantes trataron de escapar, pero los vecinos lograron alcanzar a uno de ellos. Lo golpearon hasta dejarlo malherido. “La Policía lo levantó y lo metió a los empujones en una camioneta. También lo golpearon”, aseguraron los vecinos de Jiménez, que ayer a la siesta acompañaban a los familiares. Fuentes de la fuerza, en cambio, aseguraron que no les permitieron que llegara la ambulancia para asistirlo.
El agredido fue identificado como Guerrero, y trasladado al Centro de Salud. Tenía graves golpes y una herida en la cabeza, contaron fuentes del hospital. Murió poco después de ser internado.
Fuentes policiales y judiciales comentaron que Guerrero cuenta con antecedentes por robos y por contravenciones. En enero de 2013 había recuperado la libertad, luego de estar detenido acusado de robo de motovehículo.
El arma con la que mataron a Jiménez, en tanto, era una 9 mm (del mismo calibre que utiliza la Policía) y tenía la numeración limada. Fue secuestrada por los policías de la seccional 13ª y de la división Homicidios, a cargo del comisario Abel Montero y del subcomisario Javier Hidalgo, respectivamente.
Ya lo habían baleado
Sánchez recordó que Jiménez ya había sufrido un asalto hace unos tres años, en la esquina de su casa. Ese día le robaron la moto, y para quitársela le dispararon en la pierna. La víctima era empleado no docente en la Universidad Nacional de Tucumán, y trabajaba en una facultad de la Quinta Agronómica.
Los hechos de inseguridad son frecuentes en el barrio, contaron los vecinos. El sábado de la semana pasada, una mujer que salía de una peluquería que se encuentra en esa cuadra, fue atacada por dos hombres armados que querían sacarle la moto.
“Estaba con su hijita y la amenazaron. La mujer se resistió y tiró la llave de la moto para el patio de una de las casas. Los vecinos escuchamos los gritos y salimos, pero los ladrones se rieron y se fueron”, comentó Sánchez.