Después de 15 años de representar a Argentina, Leo Gutiérrez está transitando con mucha emoción su último torneo con la camiseta celeste y blanca. Aunque tenga enfocada su mente en rendir al máximo y mantenerse en buen nivel, el jugador de Peñarol reconoció que por momentos siente melancolía por estar terminando un ciclo tan exitoso como inolvidable.
En pleno desarrollo del Mundial de España, Gutiérrez habló de sus sensaciones en esta despedida de la selección, agradeció el apoyo de la gente de Mar del Plata y aseguró que este equipo merece terminar en una muy buena posición en la Copa del Mundo.
-¿Cómo estás viviendo lo que será tu último Mundial?
-Hablando un poco con la familia decíamos que se está haciendo un poco pesado y tedioso porque hace muchos días que estamos afuera sin poder vernos. Ellos me dicen que lo disfrute que va a ser el último y lo estoy disfrutando, pero la realidad es que no se puede mucho porque hay que jugar todos los días y tenés que estar muy concentrado. Intento disfrutarlo. Sé que va a ser el último y que es una despedida de la selección. Pero trato de estar al máximo y concentrado en lo que tengo que hacer y no pensar tanto que es el último torneo. Se extraña a la familia, pero se disfruta a la vez.
-¿Te está costando afrontar este cierre de ciclo con condimentos tan especiales?
-Ni hablar. Estamos en una edad en la que se están cerrando ciclos. Ahora en la selección y después veremos los años que me queden por competir en Argentina. Cuando llegan los últimos años de la carrera empezás a disfrutar todo un poquito más, te agarra un poco de melancolía también, pero intentamos llegar de la mejor manera posible y disfrutar de los compañeros. Tenemos un grupo de chicos espectacular. Después estas cosas se van a extrañar, así que trato de sacarle el jugo lo máximo posible.
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¿Sentís la responsabilidad de ir dejando el legado para los más jóvenes que hoy integran la selección?
-Los más veteranos de este grupo intentamos darle algo positivo a los chicos. Creo que ellos lo están tomando de buena forma. Seguimos intentando marcar un poco el camino. Los pibes ya no son tan pibes. Saben mucho de qué se trata esto. Han estado en distintos procesos y saben por donde tienen que ir. Lo que pueden llegar a marcar Pablo (Prigioni), Chapu (Nocioni), Luis (Scola), Walter (Herrmann) o yo siempre es tomado de buena forma porque no son tontos. Saben que lo que les puede decir un Prigioni o un Scola es algo importante.
-¿Ya te pusiste a pensar cómo querés que se recuerde tu paso por la selección?
-Creo que me van a recordar bien porque cada vez que estuve en la selección he entregado todo por el equipo de turno. He estado en muchos procesos y la he pasado muy bien. Creo que la gente entiende el trabajo que tengo que hacer en la selección. Muchas veces no es muy vistoso pero intento dar lo mejor para que Argentina esté en un buen lugar.
-No usás redes sociales, no tenés Facebook, ni Twitter… ¿Te enterás de lo que pasa en Mar del Plata y en Peñarol con el orgullo que siente la gente por tenerte a vos acá?
-No tengo todas esas cosas porque no me gustan. Me cargan porque me quieren abrir un Twitter y yo les digo que no. Me dicen que lo haga por lo menos para seguir las noticias, pero creo que no lo sé usar. Me cuenta mi familia que la gente está enchufada con el equipo. Tengo muchos amigos en Mar del Plata que me mandan mensajes de apoyo, de aliento. Y a nosotros nos gusta saber que están disfrutando, tanto la gente que viene a la cancha a alentarnos como los que no están acá.
-¿Qué sensaciones tenés de cómo está el grupo y las posibilidades que tiene Argentina?
-Las sensaciones son muy buenas. Estamos muy conformes y contentos. Esperemos que podamos estar en una muy buena posición. Creo que nos la merecemos por la forma de juego que estamos teniendo. Hay que seguir mejorando, pero esto es largo y queremos terminar en la mejor posición del grupo para tener un buen cruce y, a partir de ahí, será a matar o morir. Esperamos llegar en buena forma a ese momento.
Fotos: Marcelo Figueras / LigateUnaFoto
