El gobierno sostiene que con el aumento del 12,11% de diciembre las jubilaciones le ganarán a la inflación. Es mentira y sin embargo el periodismo la repite sin aplicar ni un poco de conciencia crítica.
Este año cierra con un 48,4% de inflación prevista al 31 de diciembre y, con el aumento confirmado del 12,11% en los haberes jubilatorios para ese mismo mes se anuncia que par todo el año el crecimiento de los haberes será de un 52,7% con lo que ganarán un 4,3% a la depreciación.
Y el gobierno sale a repetirlo hasta el cansancio, pretendiendo que ha cumplido una promesa hecha durante la campaña por el presidente y que al hacerlo muestra su especial sensibilidad con «los abuelos» como gusta llamar a los adultos mayores.
Al mismo tiempo el periodismo, para apoyar o criticar la política previsional de la dula Fernández-Raverta, toma estos números como base del comentario electoral demostrando una vez más la carencia de conciencia crítica que viene caracterizando a la actividad desde hace mucho tiempo.
Algo que adquiere especial gravedad cuando la respuesta a cualquier duda está dada por una simple fórmula matemática y, por supuesto, el mínimo esfuerzo dedicado a la búsqueda de la verdad.
Porque el aumento del 12,11 % estará vigente hasta marzo de 2022, de manera tal que para saber si los jubilados le ganan o pierden frente a la inflación solo hay que sumar lo previsto para diciembre, enero y febrero y conocer entonces cual es la verdad de esa «carrera moral» que tanto preocupa al gobierno.
Y poniendo un promedio del 3% mensual -lo que parece demasiado optimista si tenemos en cuenta que la proyección indica algo más para diciembre y que enero, por cuestiones estacionales, siempre es más alta- deberíamos concluir que cuando los jubilados vuelvan a cobrar un aumento sus haberes habrán perdido un 4,7% frente a la inflación.
La cuenta correcta sería la siguiente:
52,7% de aumento jubilatorio al 31/12 menos 48,4% de inflación al 31/12 = 4,3% a favor de los jubilados
Pero, al próximo aumento, la ecuación sería: un 9% de inflación al 28/2 menos el 4,3% de ganancia en los haberes a esa misma fecha= 4,7% de pérdida frente a la inflación al momento de recomponer sus ingresos.
Así de sencillo y así de claro…
Tan claro como la necesidad del gobierno de mentir para esconder una nueva claudicación ante la clase pasiva, pero no tanto al tratar de entender a este periodismo mediocre, inculto y despreocupado que se limita a repetir consignas que le son impuestas en vez de utilizar, al menos, un mínimo de criterio para analizar las cosas.
Definitivamente…no somo mejores que los mentirosos. La impericia es también una forma de corrupción.
