La estrategia electoral que marca Cristina, y que Daniel Scioli ha decidido acompañar mansamente, se hace fuerte en la idea de continuidad. Y eso parece no gustarle demasiado a los mercados.
¿Van las cosas por buen camino?, ¿es Kicillof -confirmado por el propio Scioli para continuar con el manejo de la economía- garantía de un cambio que asegure la recuperación de crédito y actividad?, ¿tendrá Scioli margen para producir los ajustes que hoy aparecen como necesarios?.
Todos estos interrogantes desvelan a los actores de nuestra economía y seguramente a la gente en general. Unos y otros perciben que no son pocas las cosas que deben cambiarse para revertir una recesión que ya está teniendo altos costos sociales en el país.
Y los mercados, que aunque a muchos le moleste son un termómetro de las expectativas, están avisando que la preocupación es creciente.
Entonces, la idea fue llamar a alguien que conociera de la operatoria real cotidiana de los mercados. Desde los tiempos de Julio Ramos al frente del diario Ámbito Financiero, el economista (y por entonces directivo del matutino) José Siaba Serrata es una opinión relevante.
“Si va a ganar el Frente para la Victoria con una alianza entre Cristina (Fernández de Kirchner) y (Daniel) Scioli, aunque eso no dure, o cambie cuando Scioli gane la elección, evidentemente es un shock. A lo mejor Scioli es sincero cuando dice que continuará este camino, pero el mercado había apostado a otra cosa y reconocer el error será duro”, explicó Siaba Serrate, en relación a que el mercado argentino apostaba a un cambio de políticas económicas con el nuevo gobierno que asumiera, pero en el caso de ganar Daniel Scioli, según él dice, continuará con el modelo kirchnerista y esto será un gran problema para muchos que esperaban otras medidas.
Él también advirtió sobre el futuro de la economía argentina si continúa en manos del oficialismo: “Por un lado el gobierno que está promoviendo esta imagen de continuidad, en el fondo si esto es pernicioso se ha cavado su propia fosa. Quizás después reaccione adversamente al ver los resultados. El gobierno parece estar interesado en instalar la idea de la continuidad, que obliga a desarmar elementos que apostaban al cambio y a la hora de bajar esos cuadros, bajará también el boom de los activos financieros. Lo que es claro es que si vamos por el camino de la continuidad y los mercados siempre van equivocados, la posibilidad de colocar deuda con facilidad será más limitada”.