Los privados deberán colaborar con la seguridad pública

El intendente Gustavo Pulti le elevó ayer al Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza que establece como una nueva obligación la instalación de videocámaras de seguridad en centros comerciales, bancos, estaciones de servicio y otro tipo de establecimientos de atención al público.

Según planteó el Ejecutivo, uno de los objetivos de esta medida consiste en potenciar la tarea de prevención y control que se realiza desde el Centro de Operaciones y Monitoreo del municipio, que de este modo podría ampliar de manera significativa el número de puntos de visualización a través de su sistema público de videovigilancia.
En la actualidad el Centro recibe y procesa las imagenes de unas 130 cámaras ubicadas distintos lugares de la ciudad, a las cuales próximamente se les agregarán otras 1.000.
Expansión
En este contexto el intendente resolvió promover una expansión aún mayor del sistema, estableciendo como una exigencia la instalación de este tipo de dispositivos en establecimientos privados de distinta índole.
Puntualmente el proyecto que ingresó ayer al Concejo establece que estarán obligados a cumplir con la norma las grandes superficies comerciales y cadenas de distribución comprendidas en la Ley Provincial 12.573; los locales de esparcimiento nocturno; bancos, casas de cambio y otro tipo de entidades financieras; estaciones de servicio y centros de compras con una superficie superior a los 1.800 metros cuadrados.
Al margen de obligar a todos estos rubros a cumplir con esta disposición, la iniciativa deja abierta la posibilidad de que otro tipo de establecimientos decidan voluntariamente instalar videocámaras en sus domicilios, para suministrarles sus imágenes al Centro de Monitoreo. «Podrán participar de este programa los particulares, vecinos o comerciantes que deseen instalar videocámaras hacia la vía pública que sean compatibles tecnológicamente con las especificaciones requeridas» por la Municipalidad, se indicó al respecto.
Nuevo centro de monitoreo
La decisión del intendente Pulti de expandir el sistema mediante la participación de privados fue adoptada en un momento en el cual el municipio lleva adelante un ambicioso plan de ampliación del centro de monitoreo.
En la actualidad esta dependencia atraviesa por un complejo proceso de modernización que entre otras cosas requerirá de su traslado hacia un nuevo lugar, ubicado sobre la avenida Juan B.Justo, frente al estadio Polideportivo.
Allí el organismo contará con un nuevo software y equipamiento que no sólo permitirá procesar las imagenes provistas por las 1130 videocámaras públicas, sino también incorporar nuevos puntos de visualización con el uso de videocámaras de particulares.
Fuentes del Ejecutivo explicaron que si bien en los últimos años hubo varias pedidos e iniciativas de concejales de la oposición para aplicar una medida de este tipo, recién ahora «estarán dadas las condiciones técnicas para hacerlo con seriedad» gracias a la fuerte inversión para lograr que el Centro de Operaciones y Monitoreo adquiera una mayor dimensión en cuanto a equipamiento tecnológico y prestaciones.
«La intención es sumar a este gran esfuerzo que realiza la comuna el aporte privado de los comerciantes, industriales y vecinos que están en condiciones económicas de colaborar con la seguridad comunitaria. Este aporte nos permitirá potenciar los alcances y estrategias de la gestión pública de seguridad», se indicó desde la Secretaría de Seguridad de la comuna en los considerandos del proyecto. El texto establece que los gastos para la compra, instalación y mantenimiento de las videocámaras serán afrontados por los titulares de los establecimientos, quienes además tendrán que cumplir con una serie de disposiciones vinculadas al uso de estos dispositivos.
Por ejemplo, se establece que las cámaras deberán ser colocadas en las entradas de los edificios y que su principal función será la de registrar imágenes del espacio público. «La obligación que se intenta imponer a los privados se relaciona con la observación de los espacios públicos aledaños a los comercios en cuestión en forma reactiva la cual resulta vital ante emergencias, persecuciones, seguimiento e identificación de personas sospechosas, a efectos de que el personal policial que acuda al lugar cuente con mayor información y pueda tomar correctas decisiones operativas», se indicó al respecto.