Mar del Plata mezcla su belleza con el trabajo infantil

Es un compromiso de todos y cada uno de nosotros. Ante cualquier duda acerca de explotación de menores tenemos la obligación moral de hacer la denuncia.

Desde el Ministerio de Trabajo de la Provincia y la Mesa Interinstitucional por la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil y Adolescente en el Partido de General Pueyrredon, se emitieron algunas sugerencias frente al incremento del empleo joven en temporada. Cómo denunciar irregularidades y qué datos arrojaron los operativos de veranos anteriores.

En pos de reducir los niveles de informalidad y ajustar el trabajo adolescente a lo establecido por ley, el Ministerio de Trabajo de la Provincia, a través de la Comisión para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil (Copreti) y la Mesa Interinstitucional por la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil y la Protección del Trabajo Adolescente en el Partido de General Pueyrredón emitieron una serie de recomendaciones frente al incremento de las contrataciones durante la temporada estival.
La intención de las autoridades es que se revierta la tendencia a no estar registrado o realizar tareas que, pese a poder emplearse en un puesto, no están permitidas para chicos y chicas de 16 y 17 años.
Según los resultados de los operativos veraniegos de 2013 y 2014, los índices de informalidad treparon en Mar del Plata y Batán al 50 y 40 por ciento, respectivamente. Eso es, precisamente, lo que se tratará de reducir con información, controles y toma de consciencia por parte de los empleadores.
“Nuestra ciudad, con tantas actividades vinculadas al turismo, se posiciona como una buena opción para que muchos adolescentes y jóvenes emprenden sus primeros pasos como trabajadores. Ellos se configuran como uno de los grupos poblacionales de más difícil inserción ocupacional, con tasas de desocupación significativamente superiores al total de las personas dispuestas a trabajar. Y además, existen estudios que evidencian que suelen aceptar condiciones de trabajo más desfavorables”, introdujeron desde la Copreti, que llama adolescentes a los chicos de entre 16 y 17 años que “deben cumplir con su escolaridad y la legislación laboral les permite trabajar pero les impone límites a las características de esos puestos”.

QUÉ SÍ Y QUÉ NO
De acuerdo a la legislación nacional, estos adolescentes “están facultados para trabajar, siempre que cuenten con autorización de sus padres, responsables o tutores, salvo que vivan independientemente de ellos, en cuyo caso no necesitan autorización”. Los empleadores, como en el sistema laboral de adultos, debe solicitar Clave de Alta Temprana –C.A.T- a través de la web de la Afip (www.afip.gov.ar).
El joven debe ser afiliado a una obra social y tener como mínimo 15 días de vacaciones. Si trabaja mañana y tarde, tiene que tener un descanso de mediodía de no menos de dos horas. Además, tiene que percibir la misma remuneración que un adulto por idénticas tareas.
Un adolescente no debe realizar trabajos penosos, peligrosos e insalubres, como tampoco trabajar más de 6 horas por día o 36 horas semanales, hacer horas extras o emplearse en horario nocturno (de 20 a 5 o 6).
“Existen importantes consecuencias para quienes no cumplan con lo normado en relación al empleo adolescente protegido, entre ellas, altas multas y la imposibilidad de acceder a beneficios fiscales y económicos, así como a la suscripción de Programas de empleo Nacionales y Provinciales”, advirtieron desde la Copreti.

ALGUNAS CIFRAS
Según un relevamiento de la Mesa, en base a los datos de los operativos laborales de Nación y Provincia durante 2013 y 2014, los adolescentes suelen emplearse en actividades de servicios vinculadas a la gastronomía, el comercio, los balnearios, la construcción y la industria pesquera.
En los últimos años, el sector gastronómico ha perdido un poco de participación como rubro en el cual se emplean los adolescentes -cayó un 15%-, pero los balnearios parecen haber aumentado la contratación de personas de esta franja etaria, ya que se incrementó en un 25%.
En materia de registración, en la temporada 2013, casi el 50% de los jóvenes consultados por los inspectores no estaban regularizados. Y en la temporada siguiente, este porcentaje fue sensiblemente menor: el 40% se encontraba en negro.
Sin embargo, una vez labradas las actas de infracción, estos adolescentes fueron registrados en el 52% de los casos en 2013 y el 78% en 2014.
En las inspecciones desarrolladas anualmente, el porcentaje de trabajadores (totales) sin registrar ronda el 35% y la regularización luego de la acción inspectiva es cercano al 55%.

DÓNDE Y CÓMO DENUNCIAR
Para denunciar el incumplimiento de la normativa sobre trabajo Infantil y protección del trabajo adolescente hay que comunicarse con la Copreti al 0800 666 2687 o al (0223) 475 4001. También pueden dirigirse a la delegación regional del Ministerio de Trabajo de la Provincia, en Luro casi España, o asistir los 3ros miércoles de cada mes –a partir de las 14- al SUM de la Secretaria de Desarrollo Productivo del Municipio, en Falucho 2381. Ahí se reúne la Mesa Interinstitucional.