Más de lo mismo: el circo sin leones contrató nuevo domador

Por Adrián FreijoUn nuevo Secretario de Economía y Hacienda asumió en la administración Arroyo. ¿Fracasó Schroeder?, no. Pero nadie puede domar fieras inexistentes.

Nadie duda de las calidades profesionales del funcionario saliente; probadas y demostradas. Sin embargo nada pudo hacer para torcer la lógica perversa de un municipio sobredimensionado y a la vez famélico.

Demasiados empleados en lugares no productivos para otorgar a los ciudadanos los servicios necesarios, hace que todo lo que tiene que ver con la comunidad sea tercerizado -generalmente a precios elevadísimos- mientras el contribuyente pena para enderezar un trámite en oficinas repletas de gente que tarda un mes para algo que debería resolverse en 15 minutos.

No hay médicos suficientes, ni enfermeras, ni personal en el EMVIAL ni en el ENOSUR, ni en nada que tenga que ver con el trato directo con el vecino.

Es un circo que no tiene leones…¿justifica entonces responsabilizar al domador?.

Lo demás es sabido y probado en este sin fín de fracasos que ha sido la gestión Arroyo, con la «ayuda» inestimable de María Eugenia Vidal, ahupada en la costumbre generalizada de una sociedad que sigue esperando que las cosas cambien al conjuro de alguna mente clarificada…y sin cambiar nada.

Porque Vidal, que ahora elige a un ignoto señor llamado Hernán Mourelle para que salve al intendente, es la misma que con Macri y Rodríguez Larreta eligieron a Zorro Uno para que se hiciese cargo de este municipio al que juran querer pero han maltratado hasta lo inconcebible cuando de reconocer su importancia se trata.

Y sabían que el hombre no podía, no estaba preparado. Ni siquiera mostraba tener demasiado contacto con la realidad cuando desvariaba acerca de un plan secreto, un desembarco en Normandía y cosas por el estilo. Ellos lo acompañaron, lo impulsaron y lo instalaron.

Ellos convirtieron a General Pueyrredón en una nada cuantitativa de la que solo importaba la cantidad de votos para neutralizar a La Matanza. Y no otra cosa…

Y se callaron cuando el nuevo alcalde se apropió de las arcas municipales para enriquecer a parientes y amigos, abrió alegremente las puertas al ingreso de más agentes, que como en las anteriores gestiones no fueron a cubrir necesidades operativas sino favores políticos y personales.

Y se acomodó a la perversa costumbre de endeudarse para pagar sueldos, haciendo lo mismo que tan ácidamente había criticado en la campaña electoral.

Esta es la realidad que deberá administrar el nuevo Secretario. Una que es inviable para cualquiera, sea cual fuese su capacidad y/o su apoyo. ¿O Agustín Cinto no llegó a estas costas a salvarnos del naufragio y en pocos meses fue el primero en hundirse en el fondo del mar?.

No es que el domador sea malo; es que no hay leones. Y entonces todo pasa por el abstracto, el discurso y el «debería ser».

Hasta que no se reorganice el municipio, se lo convierta en operativo, se deje de pagar salarios superiores al que ganan el resto de los marplatenses a personas que no aportan nada a la eficiencia, no habrá solución aunque Cristo queme su segunda llegada en convertirse en administrador de la comuna.

Es así de sencillo…y así de grave. Este circo es inviable, hay más gente en la pista que en las gradas, el dueño no sabe ni donde queda la carpa y desde una lejana ciudad siguen enviando domadores cuando todas las fieras se han escapado.

Y nadie entiende nada…