El presidente ruso, Vladimir Putin, ha vuelto a llamar este viernes a la cúpula ucraniana a un alto el fuego, al tiempo que ha pedido a los rebeldes prorrusos la apertura de un corredor para permitir la salida de la zona de combate de las unidades ucranianas rodeadas.
El Gobierno de Kiev debe «sentarse de inmediato con los rebeldes del este y solucionar todos los problemas por una vía pacífica», ha señalado en un comunicado publicado este viernes. Sin embargo, el texto no pide un alto el fuego por parte de los insurgentes.
El líder separatista, Alexander Sajarchenko, ha saludado el llamamiento y ha dicho que el «ejército popular» está dispuesto a permitir la retirada de las unidades del Gobierno, pero sin armas ni munición, dijo en declaraciones a la televisión estatal rusa.
Mientras tanto el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, ha vuelto a hablar este viernes por teléfono con la canciller alemana, Angela Merkel, sobre la situación en la ex república soviética y le ha confirmado su intención de viajar este sábado a Bruselas para entablar conversaciones con la UE, según ha informado Kiev.
Víctimas en aumento
Un total de 2.593 personas han muerto en los combates en el este de Ucrania desde mediados de abril, según ha informado un alto funcionario de la ONU.
«La tendencia es clara y alarmante. Hay un aumento significativo del número de muertos en el este», ha afirmado Ivan Simonovic, subsecretario general para los Derechos Humanos.
«El número actual de fallecidos es de 2.593, casi 3.000 si contamos las 298 víctimas del vuelo MH17 derribado», ha añadido.
