Es un cálculo que hacen los expertos y está muy por encima del 7,5% que informa el Gobierno a través del INDEC. Para hacerlo «esconde» a millones tras los planes sociales.
El nivel real del desempleo en la Argentina equivale actualmente al 12% de la población activa. Esta cifra es muy superior al 7,5% que informa el Gobierno a través del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC). Así, en lugar de haber 1,2 millón de desocupados como dice la estadística oficial, este problema afecta a 2 millones de personas.
Esta conclusión a la que llegan los expertos se debe a que, en proporción, ahora hay menos gente ocupada que durante la crisis de 2009 y se redujo a un nivel comparable con los primeros años de recuperación económica después del colapso de la convertibilidad. Hay que remontarse a 2004 para encontrar una tasa de empleo similar a la que informó el INDEC para el tercer trimestre de 2014.
De acuerdo con la estadística oficial, entre julio y septiembre de 2014 la tasa de empleo fue del 41,3%, por debajo del 41,6 al 43,4% que se registró en iguales meses entre 2006 y 2013. Recién en el tercer trimestre de 2004, con el 40,6% se encuentra un porcentaje inferior al de igual periodo de 2014.
Sin embargo, eso no se tradujo en un incremento de la desocupación (el último dato oficial es del 7,5%) porque al mismo tiempo mucha gente se retiró o directamente no ingresó al mercado de trabajo. Esto último es algo que sucedió especialmente entre los jóvenes. La tasa de actividad es ahora del 44,7%, cuando llegó a alcanzar el 46,7% entre los años 2004 y 2006 (ver infografía).
Esta caída de dos puntos en la tasa de actividad equivale a unas 800.000 personas que dejaron de buscar activamente un empleo.
De aquí se desprende, como sostienen muchos especialistas que en la Argentina hay un fenómeno de “desempleo oculto” y que si en 2014 se hubiera mantenido la proporción de población económicamente activa que se registró entre 2011 y 2013 habría 800.000 desocupados más: en total 2 millones de personas.
“El llamado fenómeno de desempleo oculto que podría estimarse en unas 800.000 personas que se retiraron del mercado de trabajo entre 2007 hasta la actualidad, podría llevar la tasa de desempleo general de la economía hasta un 12,1%, significativamente superior al 7,5% informado por el INDEC para el tercer trimestre de 2014”, sostuvo en un reciente informe la Fundación Mediterránea.
El estudio agrega que este achicamiento tanto de la tasa de actividad como de la tasa de empleo “va a contramano de la evidencia internacional de aquellos países que lograron forjar mercados laborales sólidos y estables, en los cuales la tendencia fue hacia un mayor involucramiento y participación laboral”.
En el caso argentino, este “desempleo oculto” comprende mayoritariamente a la gente joven. “La evidencia respecto a la evolución de la tasa de participación laboral juvenil da cuenta de una indeclinable tendencia hacia la inactividad laboral. La tasa de empleo entre los jóvenes (14 a 29 años) reviste un comportamiento errático y hacia el tercer trimestre de 2014 el indicador alcanzó el nivel más bajo desde 2003, tanto para varones como para mujeres. Si se añade que 6 de cada 10 puestos de empleo conseguidos por jóvenes son precarios e informales, la información deja en claro la significativa cuenta pendiente en materia de generación de oportunidades de empleo genuinas y productivas”, concluye el trabajo de la Fundación Mediterránea.
Ismael Bermúdez
Clarín