Ayer comenzó la medida de fuerza en reclamo de un bono o aumento salarial antes de fin de año. Fue acompañado con un marcha en la Casa de la Provincia.
Los docentes bonaerenses cumplieron ayer la primera jornada de un paro de 48 horas en escuelas públicas y privadas en reclamo de un bono o aumento salarial antes de fin de año, medida que calificaron de «contundente» y que acompañaron con una marcha a la Casa de la Provincia, en la Ciudad de Buenos Aires.
La Federación de Educadores Bonaerenses (FEB) evaluó en base a un relevamiento que el primer día de paro que cumplieron con los docentes de Suteba, UDA, Amet y privados de Sadop fue «contundente, con una adhesión de entre 97 y 98 por ciento». Asimismo, destacó que «en algunos casos llegó al 100 por ciento de ausentismo» y advirtió que es posible que se profundicen las medidas con protestas en cada distrito de la provincia.
La jefa de FEB, Mirta Petrocini, afirmó que habían anticipado «una medida de fuerza contundente, porque los docentes venimos reclamando la revisión de nuestro deteriorado salario desde las vacaciones de invierno y no tuvimos respuesta».
Petrocini justificó el paro de 48 horas de los maestros y dijo que «la inflación viene acelerando y pulverizó» el poder adquisitivo, y remarcó que «más allá del pedido de un incremento de haberes, la huelga apunta a exigir un mayor presupuesto para educación».
«Queremos recuperar el salario devaluado con un aguinaldo extraordinario o bono que nos permita aliviar la caída del poder adquisitivo provocada por esta inflación que viene acelerando y pulverizó lo que se pudo conseguir», remarcó la dirigente sindical.