Algunos bienvenidos y otros no tanto forman el variopinto grupo de invitados que asistirán a la asunción de Tabaré Vázquez como presidente del Uruguay.
El rey Juan Carlos de España, los presidentes Nicolás Maduro (Venezuela), Raúl Castro (Cuba) y Dilma Rousseff (Brasil) sí arribarán a Uruguay a partir de hoy sábado para los actos de mañana.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, estuvo dos días Uruguay para despedirse del presidente saliente José Mujica, pero no se quedó a la asunción de Vázquez por motivos que no fueron explicados. Durante su estadía en Uruguay, Morales tuvo una intensa agenda junto a Mujica, al que se refirió como su «amigo», y no se mostró con Vázquez.
En cuanto al vicepresidente argentino Boudou, no está confirmada la hora de su llegada a Montevideo. Fernández de Kirchner mantiene una fría relación con Vázquez, consecuencia del conflicto bilateral por la instalación de Botnia (hoy UPM) durante la administración de Néstor Kirchner y por eso prefirió no estar presente y mandar en su lugar al procesado vice, lo que generó no pocas caras largas en las autoridades uruguayas.
Respecto a Biden, la Casa Blanca informó ayer que debido a un «resfrío» se hizo un ajuste en su agenda para eliminar la etapa de su viaje a Uruguay.
En 2010, cuando asumiera Mujica, la delegación de Estados Unidos estuvo encabezada por Hillary Clinton, entonces secretaria de Estado del presidente Barack Obama.
Venezuela.
Pero la visita que más atención ha despertado es la del venezolano Maduro, debido a la crisis por la que está pasando ese país y a la represión a opositores al régimen chavista.
La presencia de Maduro en Montevideo, quien según unas versiones llegaría hoy a las 16.45, en tanto desde la embajada se informa que vendría mañana domingo a primera hora, es fuertemente resistida desde la oposición, que ha reclamado en las últimas horas que suspenda su viaje a Uruguay.
El líder de Alianza Nacional, senador Jorge Larrañaga, se pronunció en contra de la presencia de Maduro en la Asamblea General en el momento de la asunción de Vázquez, al tiempo que exhortó a todos los legisladores a hacerse presentes en la «casa de la democracia». Sobre Maduro, Larrañaga escribió en su cuenta de Twitter que «no debería estar» porque «su gobierno viola derechos y libertades». Y culminó: «Expresaremos nuestro rechazo por su presencia en el edificio de la Democracia uruguaya».
Desde Venezuela, el ex candidato presidencial de la oposición al régimen chavista, Henrique Capriles, que denunciara irregularidades en las elecciones en su país, le envió una carta a Mujica, en su condición de presidente pro témpore de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), en la que le pide que intervenga en la crisis venezolana.
Rechazo.
El domingo está previsto que un grupo de venezolanos residentes en Uruguay se concentren a partir de la hora 9 en avenida Libertador y Yaguarón con banderas de su país y carteles de repudio a Maduro. En tanto, para la hora 13 se prepara una marcha en el Obelisco en rechazo a la visita Maduro.
En el único pronunciamiento hasta ahora de gremiales estudiantiles, la Corriente Gremial Universitaria (CGU) de Derecho, que nuclea a los estudiantes de la Facultad de Derecho de la Universidad de la República afines al Partido Nacional, declaró su «aversión total a la práctica de la violencia en toda su extensión y más aun cuando esa violencia no es más que la respuesta cruenta e intolerante que amenaza la integridad física de nuestros compañeros estudiantes» venezolanos.
