QUIERO SER UN PERRO CHILENO

Tres jóvenes chilenos reciben una condena más fuerte por matar  a una perra preñada que un argentino que mata a dos personas manejando a 170 km/h sin respetar los semáforos. Triste.

Tres jóvenes chilenos fueron condenados a 10 meses de prisión efectiva por atar a una perra preñada al paragolpe de su automóvil y arrastrarla centenares de metros a gran velocidad.

Los jueces tuvieron en cuenta la crueldad del acto, la vida del animal sometido a violencia y la vida por nacer de su cría. A pesar de recibir una fuerte multa, los implicados deberán cumplir la condena en el penal de Copiapó, uno de los más duros de Chile.

Lucas Trasancos, quien en 2013 atropelló y mató a dos motociclistas con un automóvil de alta gama en el barrio porteño de Flores conduciendo a más de 160 km/h y cruzando un semáforo en rojo, fue condenado este martes a 4 años y 2 meses de prisión por el delito de homicidio culposo agravado por la conducción antirreglamentaria del vehículo, decisión judicial que provocó el repudio de los familiares de las víctimas. Además, se confirmó que continuará en libertad en tanto se confirme el fallo.

El Tribunal Oral Criminal 7 dispuso esa pena al encontrar a Trasancos penalmente responsable del asesinato de Jacobo Ramos, de 21 años, y Viviana Beatriz Álvarez, de 25, a quienes dejó abandonados sin prestarles asistencia.

La conclusión es clara y contundente: es preferible ser un perro en Chile que un ciudadano en la Argentina.

Triste pero real.