Fue detenido en la calle el matador de un empleado municipal

Al cabo de una paciente investigación y vigilancia del imputado, personal policial logró detener ayer a un joven de 23 años y acusarlo del asesinato de Ricardo Locatelli (55).

Efectivos de la DDI y la comisaría duodécima allanaron la vivienda en donde fue detenido el imputado.

«Papush» tiene 23 años y una pierna más corta que la otra. Por eso su imagen nunca pasó inadvertida en la villa Gascón y por esa discapacidad es que una testigo lo reconoció de forma inconfundible como uno de los autores del asalto que terminó con la muerte del empleado municipal Ricardo Locatelli (55).

Ayer por la tarde, un grupo de policías de la DDI local de la comisaría duodécima allanó un domicilio de la calle Gascón al 7700 al tener el dato del regreso de «Papush» al barrio, que había abandonado tras el hecho ocurrido en el mes de marzo.

El fiscal Alejandro Pellegrinelli imputó al detenido de «homicidio en ocasión de robo» y ordenó su traslado a la Alcaidía Penitenciaria de Batán. En las próximas horas el fiscal le tomará declaración a «Papush», cuya verdadera identidad es Leandro Echevarría.

La trágica historia de la muerte de Locatelli se inició el 16 de marzo de 2015 a las 20.30. Esa noche el empleado municipal llegó hasta la vivienda en obra de su hermano, ubicada en Falucho al 7700. Aunque estaba acompañado por su madre de 79 años se decidió por ir a supervisar el avance de la construcción pero a poco de llegar se aparecieron dos jóvenes.

Locatelli y su madre vivían a solo dos cuadras del lugar y habían llegado caminando, pese a que la mujer padece una discapacidad motriz. Los dos individuos se aproximaron y sin darle tiempo a Locatelli de preguntarles lo que querían se le abalanzaron y lo atacaron. Uno de los delincuentes tomó un trozo de madera y golpeó al empleado municipal en la cabeza, causándole un semidesvanecimiento. Esa reducción de la capacidad de defensa de Locatelli fue aprovechada por los agresores para despojarlo de un teléfono celular y una cifra de dinero cercana a los 200 pesos.

Los atacantes escaparon y la mujer comenzó a pedir socorro a los gritos. Algunos vecinos auxiliaron a Locatelli y luego una ambulancia lo condujo hasta la guardia del Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), donde permaneció internado con un severo traumatismo de cráneo.

Con el correr de los días la salud de Locatelli se deterioró y finalmente el 22 de marzo las autoridades del HIGA confirmaron a la policía el fallecimiento.

La secretaría de seguridad Municipal, a cargo de Rodolfo Iriart, dio su respaldo a la investigación proveyendo distintos recursos.

Investigación

Por haberse tratado en principio de un robo «común» y sin una consecuencia grave, no se trabajó sobre la escena del crimen con la rigurosidad de un homicidio. Sin embargo, la comisaría duodécima, a cargo del subcomisario Edgar Marcelo Heredia, tuvo la precaución de secuestrar el trozo de madera manchado con sangre y luego inició una serie de averiguaciones que permitieron localizar a una testigo ocular.

Esta persona es una mujer del barrio, sordomuda, que prestó absoluta colaboración más allá de sus naturales impedimentos. El fiscal Pellegrinelli sugirió a la DDI la toma de declaración de esta persona, para la cual fue necesaria la utilización de los servicios de un intérprete.

La testigo señaló como uno de los autores del hecho a «Papush», a quien reconoció de manera inconfundible cuando se retiraba presuroso del lugar. Este joven era por todos conocidos en el barrio, no solo por su características física singular sino también porque vivía en la misma manzana de donde ocurrió el hecho.

La policía dispuso la búsqueda de «Papush», poseedor de algunos antecedentes aunque por delitos menores, pero no lo pudo localizar. Las fuentes barriales aseguraron que se había mudado a otro sector de la ciudad y en las semanas siguientes nada se supo de él.

Sin embargo, en los últimos días surgió el dato de su retorno al barrio por lo que la policía de la DDI, especializada en localización de prófugos desplegó su personal, con apoyo de la dependencia de jurisdicción.

Finalmente ayer la policía, con la respectiva orden de allanamiento y captura, allanó el domicilio de Gascón al 7700 y detuvo a Echevarría.

Respecto al otro partícipe del hecho, existe una identificación preliminar pero la carga probatoria no es suficiente para que la Justicia de Garantías ordene su detención. La policía continúa con la investigación.

Fuente: La Capital