El Intendente de San Isidro, Gustavo Posse, aseguró que «si la oposición no se uno, no hay chance de ganarle a Scioli».
Desde Pinamar, donde pasa las vacaciones, el ex radical y actual aliado del Frente Renovador -por el que busca ser uno de los precandidatos a gobernador de la Provincia de Buenos Aires- fue contundente: «Massa se amesetó. Scioli viene en una escala superior y Macri también».
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En dos entrevistas consecutivas con Perfil y Clarín, Posse insistió con la idea de que la oposición se junte y hasta mandó a Massa a ser «vice de Macri», dada la trayectoria y armado de este último. Sin embargo, aclaró que «hay mucha gente de vacaciones» y las candidaturas y estrategias se definirán hacia febrero.
Crudo, el funcionario municipal aseguró que no son «super fuertes en la provincia» y cuestionó la política de incorporaciones del massismo: se mostró a disgusto con el ingreso de Francisco De Narváez en Provincia, de Olga Riutort en Córdoba y el eventual desembarco de Martín Insaurralde, al que considera responsable «de la indignidad de los habitantes de Lomas de Zamora». O «Afríca Central» como denomino al municipio del sur.
En pleno receso estival y con la campaña a la vera del mar, Posse no dudó en sembrar la duda -«así no le ganamos a Scioli»- y en pedir unidad: «Hay que ser generosos y ofrecer un cambio después de décadas con el mismo signo político».
Para eso, se ve, pedirá que Massa se baje.