Por: José Luis Ponsico (*) – Esta vez, Rodolfo Arruabarrena le ganó a Marcelo Gallardo. River, sin reacción, dió ventajas atrás. Siente algunas ausencias. Ventas y lesiones.
El «Cholo» (Diego) Simeone hubiera dicho «Boca ganó con <el cuchillo entre los dientes<«. Esta vez, Rodolfo Arruabarrena le ganó a Marcelo Gallardo. River, sin reacción, dió ventajas atrás. Siente algunas ausencias. Ventas y lesiones. Carlos Tévez como punta, algo incómodo.
En la primera parte Boca «maniató» a River en el medio campo. Antes había pasado pero al revés. En la mitad de la cancha el «millonario» no hizo pié durante media hora. Pronto, resbalón de Gonzalo Martínez y pelota larga de Fernando Tobio a espaldas de Eber Alvarez Balanta, al velocísimo Sebastián Palacios, derivó en el único gol.
La lesión de Fernando Gago, infortunio, no resultó merma para el planteo del «Vasco». El ingreso del uruguayo Nicolás Lodeiro brindó juego del medio para arriba. Además, apareció solo en el área para definir con zurdazo, arriba. Inatajable. Previo, Marcelo Barovero había salvado ante Tévez
Boca no mereció perder contra San Lorenzo una semana antes. Vivió un clima político no positivo. En homenaje a Juan Román Riquelme el ídolo «xeneize» dejó reflexiones como «equipo combativo, pero sin juego». Otros ex notables, Blas Giunta, no ajeno a la cuestión pre electoral, también estuvo crítico.
A unos cien días para elecciones, hoy estaría repitiendo Daniel Angelici. Boca puntero, chance en los dos torneos. El de «los treinta equipos» -ahora «apasionante», hasta hace dos meses «locura de AFA», según parte del periodismo- y también la <Copa Argentina<, que la ganó hace tres años.
River perdió eficacia. Al menos, la que tuvo el año pasado cuando alcanzó récord de 32 partidos sin perder. Doce con Ramón Díaz y veinte con el primer ciclo de Marcelo Gallardo. En el lapso, remontó doce resultados adversos. Algo que ahora parece casi imposible.
El popular «Muñeco» Gallardo perdió a seis futbolistas por ventas -y lesiones- del primer equipo titular. No estuvieron Jonathan Maidana y Leonel Vangioni por lesiones. Tampoco Leonardo Pisculichi, en el banco. Se fueron Ariel Rojas, Teo Gutiérrez, Fernando Cavenaghi y Germán Pezzella, relevo con goles importantes.
Consuelo riverplatense: mientras Boca invirtió casi 40 millones de dólares desde agosto 2014, en una veintena de futbolistas, River alcanzó el tributo que nunca antes había obtenido en un cuarto de siglo. Otros 40 millones de dólares.
Ingresos por venta de futbolistas, premios de copas internacionales y recaudaciones. Sin olvidar el merchandisig del universo riverplatense. Cuatro títulos en ciclo muy recordado. Ganando torneo de AFA. con Ramón, la Sudamericana, Recopa y Copa Libertadores. Todo en un año.
(*) Columnista de la Agencia Télam