Redacción – Todos presentaron sus renuncias. ¿Todos?, bueno «casi» todos. Los hombres de Cristina que tienen como misión limpiar sus causas penales sugestivamente miran para el costado y se quedan.
Ni presa de una de sus habituales histerias Cristina Fernández de Kirchner deja de pensar en aquello que la obsesiona: limpiar todas las causas judiciales que la involucran a ella y a sus hijos y de esa forma conseguir la tan ansiada tranquilidad que le permita disfrutar de su fortuna incalculable, e inexplicable, sin correr el riesgo de recibir sanciones penales.
Por ello a nadie sorprendió que los únicos funcionarios propios que no presentaron sus renuncias al presidente Alberto Fernández fuesen el Procurador del Tesoro, Carlos Zannini y el viceministro de Justicia, Juan Martín Mena, cuya continuidad servirá para taponar cualquier decisión presidencial que pueda afectar al titular del área Martín Soria.
El mensaje es claro: crisis de gobierno si, pero yo sigo asegurada contra todo.
Patriotismo para todos, todas…y todes.